Abril

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Principios del cálido mes, adentrando la primavera, todo parecía florecer y empezó a conmover.

Sabor dulce, felices días, sonrisas sinceras, abrazos con el alma, lágrimas emotivas y alegrías en todos mis días.

Emociones, sentimientos y sensaciones floreciendo dentro de mí, en cada parte de tí.

Abrazos con el corazón a mil por hora,
miradas con amor,
mi cuerpo se estremecía con sus labios acercándose a los míos,
mariposas revolviendo mi interior.

Todo era color de rosa,
viajes llenos de ilusiones,
nuevas experiencias,
vivencias inolvidables,
sueños cumplidos,
personas increíbles,
Madrid y sus encantos.

Empezó el mes de ensueños, primeros días sin palabras, los mejores días de mi vida, te quieros sinceros, reencuentros y despedidas.

Tensión sexual,
ganas de fundirnos,
mi piel ardía con el roce de sus labios,
mi cuerpo temblaba cuando me tocaba,
besos con sabor a tí,
besos con sabor a fresa,
besos con lengua hacía mí,
apasionados, largos, cortos, adentrando en sus profundidades, besos intensos.

Final del frígido mes, volviendo la tormenta, todo parecía empavorecer y empezó a doler.

Sabor amargo, triste día, corazón quebrado, lágrimas de sangre, aflicción, último abrazo con el alma encogida y despedida sin compasión.

Pérdidas irreparables,
marcas en todo mi ser,
huellas imborrables.

Terminó el mes con un dolor indescriptible.

Bendito y maldito mes abril.

Luminiscencia incandescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora