lo que esconde el árbol tras el amanecer.

XXXIII

hacía frío y no llevaba abrigo
las medias de red se apretaban en mis piernas
mi amiga me pidió que le avise cuando llegue
pero no hay suerte que me pegue
como oscuras sombras vinieron hacia mí
y ya no pude escapar de ésta tortura son fin.
el frío me congelaba, pero eso no me importaba
se abalanzaron sobre mí
y toda mi fuerza di
pero me resigné entre llantos y súplicas
que desgarraban mi alma
cerré los ojos y me fui.
me dolía todo el cuerpo,
y para ellos era sólo un juego.
grité basta pero no se escuchó
pedí ayuda pero nadie llegó
mamá, perdón
pero no fue mi culpa
y la de mi ropa tampoco
pero no avisé que no llegué
de eso se encargó el noticiero
dijeron que me prendieron fuego
pero en fuego estaban mis ojos y mi alma
mantén la calma
di lo mejor de mí
te prometo que luché
pero aunque no gané
acá estoy, y están por mí
afuera, en la calle, en la vereda, en el bondi
ya no llores más por mí.