Capítulo 2

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—Esta es mi humilde casa, un poco desordenada, pero encantadora.
—¡Vaya, que grande!— exclamo asombrado.
—Y eso no es lo único "grande" que tengo, chuletita…— dice en tono sensual hacía mi.
—Amo…— mis ojos resplandecen al verlo.
—Yuri…— cierra los ojos y estira los labios mientras se acerca hacia mi, yo hago lo mismo.
—Oye Viktor necesito que… ¿que demonios haces con esa chuleta? ¿!!Y PORQUE TIENES LOS PANTALONES ABAJO!!?
—Este… ¡no es lo que piensas Yuri!
—¡Degenerado, me largo de aquí!
—¡Espera Yuri!— el chico voltea la mirada— ¿No es lindo?— me muestra hacia el chico.
—Mucho gusto, cariño, ¡kyaaa! ¡Comeme!
—…
—¿Yuri que pasa?— dice mi amo preguntando al chico rubio.
—Tengo que limpiarme la nariz.

Las suculentas aventuras de Yuri: la chuleta de cerdoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora