Rose se sobresaltó al escuchar la puerta. Miró su reloj que anunciaba que era la una y media de la mañana, entrecerró los ojos y se levantó a paso lento. Cuando estaba llegando dos golpes suaves volvieron a sonar y Rose se apoyó en la puerta.
-¿Quién es? – susurró adormilada y confundida.
-Soy Jennifer – Rose no esperó a escuchar lo que seguía y abrió la puerta –sé que es tarde y tenemos que descansar, pero necesito que hablemos sobre algo.
-¿Estás bien? ¿Pasó algo?
-Sí, pasó algo Rose – su mejor amiga la tomó de la mano para que entrara.
Caminaron hacia la cama y Jennifer se sentó en la alfombra, generalmente le gustaba mucho sentarse en el piso y más cuando se encontraba así de nerviosa. Sabía que no tenía que sentir nervios, seguro Rose la iba a regañar porque le había ocultado algo así, pero era peor no contárselo nunca, se había prometido contarle cuando la gira terminara y ese día había sido su último concierto.
-¿Te pasó algo mientras estuviste fuera? – Rose jugaba con las sábanas, se notaba su nerviosismo.
-No Rose, no es nada de eso. Es algo sobre Paul – su mejor amiga entornó los ojos y se sentó en el piso al lado de Jennifer.
-¿Él te hizo algo? ¿Qué te dijo?
-Tengo que contarte algo que te oculté en este último tiempo, no quería arruinar tu primera gira así que por eso no dije nada.
-¿Qué pasa Jennifer? – Rose se encontraba confundida y un poco enojada, esperaba que Jennifer no le dijera lo que estaba pensando porque no sabía cómo iba a reaccionar.
-Unos días después de llegar, el día que vos fuiste a ver a tus tíos yo me quede con la cámara de Paul aunque le dije que tenía la mía – Rose asintió, Jennifer iba a contarle toda una historia para decirle lo que pasaba, así era ella divagaba mucho – encontré un lugar para revelar las fotos y comprar los rollos que le prometí que iba a devolverle así que en la noche fui a su habitación y se los di.
-Jennifer – le advirtió Rose y ella suspiró.
-Paul intentó besarme – los ojos de Rose se abrieron de par en par y se levantó rápidamente del piso.
-¿Qué hizo qué? – Jennifer también se levantó para agarrar a su mejor amiga por si decidía salir corriendo de la habitación como una fiera y buscar a Paul.
-Rose, no pasó nada esa noche y ningún día después. Cuando te decía que entre él y yo no iba a pasar nada era cierto, él se comportaba así conmigo porque creía que estaba enamorado de mí.
-¿Enamorado? ¿Paul enamorado? No me hagas reír – puso los ojos en blanco y Jennifer pudo notar como apretaba los puños.
-Rose – Jennifer tomó las manos de su mejor amiga y Rose la miró, podía ver el enojo y también la tristeza en sus ojos- él no está enamorado de mí, solo creyó estarlo porque yo era buena con él, Paul en realidad está enamorado de vos – Rose soltó una carcajada sarcástica y Jennifer frunció los labios, sabía que eso iba a ser difícil.
-Él no está enamorado de nadie, él no puede enamorarse.
-¿Por qué decís eso? Todos podemos enamorarnos.
-Él no.
-¿Por qué no? ¿Por qué no queres contarme lo que pasó entre ustedes? Sé que estuvieron saliendo, sé que se amaban Rose, también puedo notar como lo miras a él, a mí no vas a poder engañarme nunca.
ESTÁS LEYENDO
You make me wanna Die
RomanceÉl, era una persona que lo tenía todo, pero a la vez no tenía nada. A los veintitrés años tenía una gran empresa bajo su cargo, porque su padre era el empresario más importante de Colombia. Él se había acostumbrado a vivir una vida aburrida, viajand...