Hexagono de varios lados.

Segundo lado.

No tengo recuerdos de mi padre, mi madre por otra parte, trato de cubrir lo mejor posible ese hueco, al principio no notaba esto, era muy pequeño, pero conforme crecía me di cuenta que no tener un padre no es algo normal.

Al principio, di todo de mi para ser u buen hijo, pero conforme el tiempo paso, me convertí en el obstáculo de la felicidad de mi madre. Mis recuerdos sobre mi infancia son sustanciales, mi madre ebria, mi padrastro diciendo que yo era una basura, y la existencia de mis nuevos hermanos, cualquiera podría decir que estaba destinado a ser un personaje deprimente, pero yo me levante y luche.

No importa cuantas manos me jalaran a la oscuridad, yo siempre podía salir, y eso era gracias a una persona; esa persona era Martín.

A Martín lo conocí en la primaria, a finales de el sexto grado, era el típico chico callado pero genial de la clase, las niñas estaban locas por el, y los chicos siempre querían tenerlo en su equipo (hasta que notaron lo débil que era jugando). en ese tiempo Martín gustaba de quedarse en la banca, tiempo en el cual mi amado padrastro me rompió una pierna, claro eso nadie lo noto, por que mama dijo que "me había caído de un árbol", fue así como el y yo terminamos hablando sobre series de tv en la sombra de un árbol, durante las clases de deportes.

No miento al decir que Martín era el tipo de chico "demasiado maduro para su edad", siempre estaba contándome cosas interesantes, lo que el gustaba mas, era de dinosaurios, el siempre terminaba comparando las situaciones a alguna especie de dinosaurio.

En esa época, las cosas en mi casa estaba de mal en peor, así que el fue un refugio para mi.

Por ello, cuando vi a Martín con ese chico tomados de las manos y besándose, no supe que pensar, o hacer, mi cabeza y mi corazón han estado confundidos.