Mi guapo acosador ││ Min YoonGi y Tú. 💦 (En edición)

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T/N.

Cada día hacía más frío. Por lo que comencé a llevar suéteres a menudo al instituto donde estudiaba.

Esa mañana particularmente me había sentido extraña. Con una sensación de inseguridad, una sensación de ser observada justo la salir de mi casa. En todo el camino de mi casa hacia el instituto pensé en lo extraño que lo había pasado estos últimos días, ya que según yo (o mi paranoia) alguien estaba siguiéndome y observándome cada que iba a algún lugar o hacía algo.

Y es que no puedo dejar de pensar en el auto que estaba persiguiéndome, en que anoche alguien entró en mi casa e hizo cosas que nadie nunca hizo conmigo y no sé si fue un sueño o real, en las notas diarias que me dejaba aquel chico misterioso. Todo esto se estaba saliendo un poco de control, y me estaba comenzando a volver loca.

Cuando llegué al instituto fui hacia mi casillero para guardar unas cosas y sacar unos libros para la clase que me tocaba ver a primera hora. Al abrir el casillero me sobresalté  debido a una nota cayendo directamente hacia mis pies. Esta vez era diferente, la nota estaba escrita en una hoja de papel color rojo carmesí, se veía claramente como en el lado inferior derecho se encontraba una caligrafía de color negro con las palabras "T/N."

Me agaché y con manos temblorosas tomé la nota.

¿Y si era del chico misterioso? ... ¿Y si es el mismo chico que entró a mi casa? ¿O aquella perosna que me persiguió en un auto? Dios, no puedo más.

No sé si se trataba a mi paranoia o a que en serio tenía cierta sensación de inseguridad, sólo tomé la carta y un poco nerviosa la abrí.

《   —Querida T/N.

¿Te gustó la manera en la que entré a tu casa anoche? Porque, sinceramente, yo lo amé.

Amé tocarte, ver cómo te retorcías ante mis toques, ver cómo pedías más. Hasta ver el cómo quedaste insatisfecha al irme, y verte mirar a través de la ventana para confirmar si fue real lo que sentiste. 

Cariño... Fue totalmente real.

Es cierto lo que dije, las notas que te dejo no sólo causan mariposas en ti, también satisfacción.

Con amor, tu mayor admirador.  》

Solté la carta y la dejé caer al piso, sintiéndome nerviosa y ahora más asustada.  ¿Fue real? ... Aquel chico entró a mi casa e intentó hacer cosas conmigo... No lo puedo creer. Esto definitivamente se está excediendo del límite, de mis límites. 

Entró a mi casa, me sigue... Me acosa.

Me sobresalté cuando sentí un ligero peso en mi hombro derecho, alejándome y sintiendo mi espalda contra los fríos casilleros.

—Hey... Calma. ¿Estás bien? — Aquel chico se encontraba preocupado, con el ceño fruncido.

—Jimin... No, no estoy nada bien. —  Hablé asustada. Ya para este punto aquellas notas no me gustaban, no sabiendo lo que era capaz de hacer ese chico.  —Necesito que me acompañes, por favor. No preguntes nada hasta que lleguemos.

Y dicho esto lo tomé por el brazo, llevándolo a los baños del segundo piso, los cuales casi nadie utilizaba. Sólo lo utilizaban algunas parejas cuando les pegaba calentura y no podían aguantar a llegar a sus casas, pero para nuestra suerte no había nadie allí. O eso pensaba.

Jimin muy confundido por mis palabras y acciones entró al baño de chicos conmigo. El castaño intentó calmarme un poco, dándome un pequeño abrazo.