Don't Tell Me Goodbye (Carl Grimes y tu)

Cap 9.

Narra Tn.

Rick corría con Carl en brazos el  cual se desangraba.

Yo iba detrás de Rick, empapada de sangre, ya que por un momento lo cargue y corrí.

Shane iba detrás nuestro con el tipo que le disparó.

Yo acá corriendo preguntandome ¿Por qué carajos estoy llorando?

¿Por qué un niño que conocía de vista hace bastante tiempo y hace poco empecé a conocerlo me hacía llorar de esta forma?

Mientras corría las lágrimas no dejaban de salir, veía borroso.

Rick se detuvo y volteó.

—¿¡Cuánto falta!? ¿¡Cuánto!? —grito.

—¿¡Cuánto falta!?— esta vez grite.

—Un kilómetro— dijo el tipo y Rick siguió corriendo yo detrás de él— Veras una casa, pregunta por Hershell.

Seguimos corriendo y a lo lejos se veía una casa.

Al llegar, un hombre viejo y canoso salió diciendo que Rick llevara a Carl hacia adentro.

Pase y seguí a Rick, entró a una habitación y dejó a Carl sobre la cama.

No podía verlo de esa forma... No en ese estado...

—Salgan de aquí, los dos —nos dijo Hershell y así fue.

Me aleje un poco de Rick y me senté contra una pared abrazando mis piernas mientas lloraba.

¿Por qué estoy llorando por él?

Pase un rato así hasta que Rick se levantó, instintivamente me pare también y lo seguí.

Entró a la habitación y se escuchaban los gritos de Carl.

—¡PAPÁ! ¡PAPÁ! —Gritaba.

No puedo escuchar esos gritos...

—¡Detente lo estás matando! —le grito Rick a Hershell.

Shane estaba al lado de Carl acariciandole la cara hasta que Carl simplemente se calló y no se movió.

—¿Carl? —lo llame —¡Carl!

—Solo se desmayó.

Mire a Rick a quien le estaba sacando sangre.

(…)

Rick no podrá seguir donando sangre para su hijo  le hará mal...

—Necesito otra transfusión de sangre —dijo Hershell.

—Ya voy —dijo Rick.

Yo me levante la manga de mi camisa y le di mi brazo a Hershell.

—Sacame la sangre a mi, Rick no podrá aguantar mucho —dije mirando la cara pálida de Carl.

—Pero... —dijo Hershell.

—La sangre de Carl es A positivo ¿no? La mía también ¿Qué espera? —dije sentandome en la silla.

—¿Sabes cuales son las consecuencias? —me pregunto mientras inyectaba la aguja en mi brazo.

—Carl es lo que más me importa en este momento, yo no importo, solo quiero que él esté bien —dije mientras trataba de contener las lágrimas.

Creo que me sacaron un litro de sangre porque quedé media mareada.

Shane y Otis se fueron a buscar cosas a una secundaria de aquí cerca, era el equipo para poder operar a Carl... Tengo un mal presentimiento...

Debería empezar a hacerle caso a mis malos presentimientos...

Ahora estoy sola en la habitación viendo como Carl esta inconsciente...

—Carl... —tome su mano — No se... Estaras escuchandome... Pero si lo haces... Tu puedes —dije ta soltando varias lágrimas— No puedes... No... Yo... Quedate a mi lado... —susurre — Te necesito...

Y fue en ese mismo momento en el que me di cuenta de cuan importante es para mi... Y no quiero que muera... Me di cuenta de que lo necesito...

—Eres un imbécil... —susurre y pase una mano por mi frente manchandola con la sangre de Carl — Otra vez rompí la estúpida regla de mi familia... Y todo es por ti... No quiero perderte... —bese su mano mientras lloraba— No me digas adios...

Me levante de la silla y me senté en la cama aun sosteniendo su mano.

Me acerque al rostro de Carl, pude sentir como respiraba... Por algún motivo mire sus labios y me acerque hasta rozarlos.

Y justo en ese momento la puerta se abrió y aleje mi rostro rápidamente e hice como si lo observara.

Mire para ver quien había entrado y era Lori.

—Lori... —susurre.

Solté la mano de Carl y me aleje de la cama.

—Gracias... Por darle sangre... —me dijo Lori mirándome.

—Él tiene que sobrevivir... —salí de la habitación y los deje a Rick y a Lori solos con su hijo.

Salí hacia afuera y me senté en las escaleras a la espera de Shane y Otis.

—¿Estas bien? —escuche a Maggie y la sentí sentarse a mi lado.

—No...

—¿Te gusta aquel chico? —me preguntó.

—No...

—¿Y por qué lloras? —me preguntó.

—No lo se... Iba conmigo al colegio... Pero no hablamos... Hace un par de días atrás que lo vengo conociendo... —mire al suelo — Supongo que es... Tristeza de verlo en ese estado...

—Te entiendo... —me dijo.

—Pero... Recién me doy cuenta de que él es importante para mi y que no lo quiero perder... Lo necesito... —la mire.

—Estas enamorada — me sonrió.

—No, no lo estoy. —mire hacia otro lado.

—Quizás ahora no... Pero si sigues pasando tiempo con él... De seguro pasará y yo quiero ver eso —rió.

—Ya quisieras —reí también.

—Fue muy lindo que le dieras de tu sangre... —la mire y sonreí.

—Tiene que sobrevivir.

¿Será cierto? ¿Si paso más tiempo con él... Me enamorare....?

Bueno, no es momento de pensar en eso...