Adelanto

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Prólogo




No es fácil de describir el estado de shock que me generó toda esa situación.

Tuve que pasar meses enteros tratando de asimilar todo, de aceptar algo tan duro como la muerte, de lo repentino que fue y sobre de cómo sería mi vida de ahora en adelante.

Dejé pasar tanto que no vi y ahora veo.

Perdí a las personas que se habían hecho responsables de mi, perdí a las personas a las que le debía mi existencia, quiénes me dieron la oportunidad de reír, de llorar, de sentir.

Aún después de las terapias no dejé de sentir la tristeza. Aquello no había sido como un mal sueño del que solo despiertas a pesar de lo ocurrido y continúas tu vida con solo su mal recuerdo. No, esto iba más allá. Era despertar y ver que aunque sabía realmente lo que había pasado (Pues algo así no se puede ignorar), aún no hallaba explicación ni un cierre lógico.

Me cansé de preguntarme ¿Por qué a mí? ¿Por qué no pude haber crecido y asistir a una secundaria donde tuviera buenas experiencias que compartir? ¿Por qué tuvo que entrar alguien a mi hogar, mi lugar seguro? ¿Por qué a mis padres? ¿Cómo terminé siendo víctima de unos intrusos asesinos?.

Y una de mis preguntas más egoístas ¿Por qué no entraron a otra casa?

Todo eso nunca me ha dejado de doler.




Nota de autora

Solo dejaré esto por acá y me iré lentamente.


CAÍDAWhere stories live. Discover now