Escuché los gritos de mi padre por el jardín, abrí mis ojos asustada, me había quedado dormida en la azotea, levante mi cabeza con un pequeño mareo y una leve migraña, mire a mi padre y a el señor Fu que me buscaban en el jardín.
-¡Ya bajo!-grite desde la azotea
-¿Qué haces ahí arriba?¿te crees un gato?-decía mi padre cabreado, corrí por la azotea haciendo que mi padre se pusiera nervioso, baje rápidamente por la escalera de mantenimiento y corrí hacia ellos, salude al señor Fu, era un socio de mi padre siempre tan sonriente y detallista conmigo, decía que le recordaba mucho a mi madre y que estaba feliz de que saliera con los rasgos de ella.
-¡Tío!-dije abrazando aquel hombre alto y gordo,que siempre llevaba lentes de sol.
-Pequeña te extrañe, ¿mi sobrina se ha acoplado a la ciudad?
-Es un asco, todos aquí son horribles, en serio...To-Dos
-¿Que te sucedió en el labio?-dijo mi tío preocupado, mire a mi padre y mordí mi labio con rabia
-Un accidente, me tropecé y caí
-Ten más cuidado, tienes que cuidar bien ese rostro de modelo, es más, les traje regalos de mi viaje de Turquía, ve por los chicos-me decía mi tío sonriente mientras se sentaba en la mesa de té del jardín junto con mi padre, corrí a buscar a los chicos.
-Franco-dije corriendo hacia el, el levantó su mirada y siguió buscando entre los vinos
-Franco...lo siento por lo de ayer...yo solo quería-me miró con una sonrisa y me dio un abrazo
-Niña me preocupe demasiado por ti, por eso envié a los chicos, solo no lo vuelvas hacer me provocaras un paro cardiaco-reí y le di un abrazo, en realidad todos eran muy buenos conmigo y eso lo agradecía.
-¿Sabes donde estan los chicos?
-¿Los chicos?, creo que están afuera jugando basketball,¿pasa algo?-negué con mi cabeza y salí a buscarlos.
-Chicos-corrí hacia ellos y mi vista se nublo, tuve un mareo que me hizo tropezar, Felix me tomó del brazo preocupado
-¿Estas bien?-dijo deteniendo el juego Christopher se acercó preocupado y me levanto el mentón con delicadeza
-Estoy bien, vengan el tío está en casa
-¿Ya llegó?.-rasco su cabeza y después corrió diciendo
-El ultimo que llegue prepara la cena-todos corrimos pero ésos chicos parecen gazelas así que me rendí preferí caminar con gracias
-¿Tanta felicidad les da por verme?-dijo mi tío sacando un maletín de cuero.
-Muy bien, Franco esto es para ti- decia mi tio dandole a Franco unos lentes polarizados
-Están muy de moda, evitan que la arena se meta en los ojos y te de una gran visión aunque el sol esté a todo lo que da, cuñado, esto es tuyo...una botella de Raki es una bebida típica de ahí, se que te va a gustar, Félix-
-Estoy tan nervioso esto parece la escena de Narnia en donde Aslan le da obsequios a todos-decía el chico como un niño risueño
-Este es un libro de Sayokan, es un arte marcial turco, puedes combinarlo con tu taekwondo y serás como un torbellino- el chico tomo el libro con emoción y abrazó a mi tío
-Christopher, este es un pequeño dron, que está de moda entre los chicos de ahí, viene incluso con micrófono y puedes guardar las grabaciones de dos días, úsalo para bien y no para espiar a las chicas-dijo mi tío guiñandole el ojo pícaramente y por último mi sobrina...esto es un ojo turco, el ojo turco extingue la maldad o cualquier energía malvada.Atrae la felicidad,suerte y buena fortuna- mire aquel collar con un ojo azul y detrás de él una pequeña luz se reflejó con el sol