En sus fauces...

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Bill al notar el terror del castaño logro que su cuerpo se estremeciera por lo cual no pudo esperarlo mas, soltó sus manos y coloco las piernas del chico en sus hombros para después sujetar sus caderas y comenzar a embestirlo con fuerza sin importarle que este hubiese comenzado a sangrar, el rubio jamas lo admitiría pero sentir esa estreches aprisionando su miembro lo estaba volviendo loco y los gemidos de dolor del castaño no ayudaban a minimizar el asunto sino que lo empeoraban.

-Sabes pino...si no me haces cabrear...puede que...te convierta en mi puta personal...

Dipper no podía ni hablar estaba aferrado a la almohada sobre su cabeza cerrando sus labios con fuerza para no soltar ningún tipo de gemido, porque odiaba admitirlo pero entre el dolor y el odio estaba surgiendo un gran placer que el, en lo que llevaba de vida no había logrado conocer, en especial porque es un príncipe y esos placeres no los tendría permitidos hasta sus 21 años, en estos momentos su mente odiaba esa tonta ley pero igual era cociente que si mostraba placer al pirata este no lo iba a dejar en paz aunque se le hiciese muy difícil soportar el no gemir ante la crueldad del hombre y el calor que este le provocaba en su interior

-Eres....un....maldito....Cipher

-Si, pero soy el maldito...que te acaba de quitar...tu virginidad pino

En ese momento Bill saco su larga lengua comenzando a marcar el cuerpo del menor con ella mientras sus dientes filosos dejaban marcas sobre este con algo de sangre de ellas, Dipper ante ello sujeto los hombros del capitán, no podía evitarlo mas, su cuerpo no lo dejaría en paz hasta que mostrara el maldito placer que ese hombre le provocaba a su inexperto cuerpo, en cuanto el rubio mordió su cuello el menor soltó un fuerte gemido de dolor pero sobre todo de placer, ante ello Bill sonrió arrogante, por fin estaba sometiendo a ese pedante y mimado príncipe pero debía admitirlo, ese gemido lo hizo excitarse aun mas

Con una sola mano rompió las cadenas de Dipper y este no tardo en abrazarse de Bill para clavar sus uñas a la espalda de este y llenar sus oídos con los gemidos de placer que este le provocaba, en esos momentos comenzaba a odiar mas a ese tipo no solo por secuestrarlo o por encadenarlo sino por haberle quitado aquello tan valioso que era su castidad y por  hacerlo gemir como una puta barata y lujuriosa

-Te...odio....

-Vaya...para gemir como una puta...guardas mucho odio...no crees pino?

Cuando este iba a reclamar le el rubio cuando junto su boca con la del menor metiendo su lengua al interior de esta recorriendo cada parte sin  olvidarse de nada, Dipper ante eso se aferro mas de el y trato de seguirle el paso, odiaba el comenzar a disfrutar como un loco ante eso, realmente odiaba a ese tipo por provocar le esas sensaciones extrañas y nuevas, pero mas odiaba el hecho de que el rubio fuese capaz de hacerlo gemir y gozar de una forma muy vergonzosa y a la vez fascinante

Bill al notar que Dipper estaba distraído con sus pensamientos mordió su labio con fuerza para traerlo de vuelta, lo volteo sin salir de el sobre la cama poniéndolo en cuatro solo para meter aun mas su miembro y comenzar a marcar esa espalda tan fina y aterciopelada, el menor sangrando de su labio no opuso resistencia al ser puesto boca abajo, simplemente se aferro de la almohada mordiéndola un poco por la brusquedad del capitán al penetrarlo de lleno

El rubio no paraba de penetrar al menor, odiaba admitirlo pero ese cuerpo inexperto y lascivo lo estaba provocando de mas hasta el punto en que seria capaz de caer a los pies de ese chico, pero como capitán de un navío pirata es el quien debía someter y no que lo sometieran, por ello haría que ese chico suplicara y deseara mas de el

por alguna extraña razón, a Dipper no le agrado que el capitán se perdiera en sus cavilaciones así que lo tomo como pudo del brazo y lo jalo hacia el besándolo de una forma posesiva y algo obscena, ante esto el rubio se sorprendió sin embargo tomo a Dipper de la barbilla correspondiendo y haciendo mas profundo ese beso sintiendo que por ese simple acto el menor se corría sobre las finas sabanas apresando mas su miembro dentro de este logrando que el rubio no se quedara atrás y se corriera en exceso dentro del menor llenándolo a tal punto que de entre sus piernas se escurría algo de su semen, ante esto el castaño se recostó en la cama completamente dormido

-Bien pino...descansa..porque mas tarde retomaremos esto ademas....aun debes trabajar en mi barco

"Una ultima vez......."Where stories live. Discover now