Primer día de Internado

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Me levanté a las 6, Edward y James ya no estaban. Empecé a vestirme y ha coger los dos libros que tenía y cuando abrí la puerta apareció Dani.
Yo: Buenos días, Dani.
Dani: Buenos días. ¿Besa bien James?
Yo: ¿Cómo sabes lo que pasó?
Dani: Soy el mejor amigo de Edward, me lo cuenta todo.
Yo: Entro a clase después hablamos.
Dani: Vale, adiós.

Cuando entré a la clase, fue un poco... decepcionante.

Profesor de Mates: Buenos días, debes ser Victoria, la novia del raro.
Yo: ¿del raro?
Pr. Mates: Sí, de Edward, es el raro de este sitio.

《Suena el timbre》

En medio de clase empezaron a tirarme hojas, libretas, lápices, estuches, tizas... No llegué a entenderlo, vale que era la nueva pero, ¿estuches? Uno de los lápices me dió en la quemadura del brazo y empezó a sangrar, aquél momento desee que no hubiera pasado; todos los alumnos empezaron a levantarse y a ponerse a mi alrededor, sacaron sus colmillos y se prepararon para morderme, entonces Edward apareció de la nada, me cogió y me sacó de clase.
Edward: ¿Estás bien?
Yo: Sí, ¿qué querían?
Edward: Tu sangre.
Yo: Quiero ser como tú, por favor muerdeme.
Edward: No me pidas eso, no te gustará.
Yo: ¿Porque?
Edward: Porque a mi no me gusta.

《Suena el timbre del final de la clase》

Edward: Corre, ven antes de que nos vean.
Yo: No puedo correr, me encuentro mal.

Edward me cogió en brazos y me llevo a la habitación.

Dani: Edward no la podrás proteger siempre.
Edward: Que me estas diciendo, ¿qué tengo que dejar que le muerdan?
Dani: No, pero...

Edward me mira y con cara rara me pregunta.

Edward: ¿Qué es eso?
Yo: No es nada...

Edward me cogió el brazo y me quitó la venda.

Edward: ¿Desde cuando lo tienes?
Yo: Desde ayer, ¿es malo?

Edward y Dani salieron de la habitación un momento, pensé que solo era una quemadura y nada más.

《Pican en la ventana》

Yo: ¡James! ¿qué haces aquí?
James: Abreme antes de que me vea la directora.

《Abrí la ventana y entró》

Creo que el pobre chico no entiende que estoy enamorada de Edward y no de él, se me lanzó encima tapandome la boca con una mano y me cogió un brazo con la otra; cuando Edward entró yo empecé a llorar, no porque me hubiera hecho algo, sino porque tenía miedo de porque me cogía así.
James: Edward... no... no es... no es lo que parece, enserio.
Edward: Ya no me importa lo que hayas hecho, lo que me importa es que sigues lanzándote encima de ella.
James: Si a ella no le gustará me conseguiría tirar al suelo.
Yo: Sabes que no es verdad, no puedo ni con un ángel. (Llorando) Por favor.
Edward: Cariño, limpiate la herida y ves a clase. Y tu James... ven. Ven conmigo.

Antes de que Edward se fuera le di un abrazo por detrás, él se giró me abrazó y me besó; al oído me dijo:
Edward: Esta noche, tu y yo tenemos que hablar.

Y se fue. Después se fue Dani, no me dijo porque, simplemente, se fue.
El reloj marcaba las 13:00, la hora de comer cogí un libro y me fui a comer.

Cocinera 1: ¿Qué quieres?
Yo: Comer...
Cocinera 2: Para ti no queda, ves a la maquina del fondo y si pillas algo ya tienes comida.

Pasé de ir a la máquina, solo con verla ya se apreciaban sus telarañas.
Salí fuera del comedor y busqué algún sitio donde sentarme, las gradas del campo de fútbol.
Cuando llegué me senté y logré escuchar como si unos chicos corrieran tras algo o alguien.

Corredor 1: ¡Ehh! ¡Tu! ¡Deja de correr!
Corredor 2: Tranquilo, Axel, ya lo pillaremos.
Axel: Esque siempre consigue escapar, Austin.
Austin: No te preocupes.

Axel era alto, moreno o castaño, depende de el sol le cambia, los ojos no logré vérselos bien; Austin era alto, rubio y sus ojos eran verdes.

Axel: (en voz baja a Austin) Mira en las gradas, hay una chica y es preciosa.
Austin: No digas tonterías, haber nos vamos detrás de las gradas y la sorprendemos, después le preguntamos que ha escuchado.
Axel: ¡Sí, líder!

Mi móvil empezó a sonar, era... ¡Mike!
Mike: ¿Donde estás?
Yo: En un Internado, ¿por?
Mike: ¿En que parte del Internado?
Yo: En las gradas.
Mike: ¡Escondete, voy a buscarte!

《Cuelga》

Austin y Axel se iban acercando por atrás mientras yo iba recogiendo mis cosas y de repente aparecieron.

Axel: Hola guapa, ¿qué haces tu aquí sola?
Yo: Ya me iba.
Austin: Tu no te vas a ninguna parte. ¿Conoces a un tal Arthur?
Yo: No.
Austin: ¿Conoces a uno que se llama... Edward?
Yo: ¡¿Qué le habéis hecho?!
Austin: Nosotros aún nada., ¿y a uno que se llama... Joe?, ¡no! se llama James, ¿verdad?
Yo: ¡No te importa! Déjame.
La irme Axel me cogió del brazo y me sentó en las gradas.
Axel: Te ha hecho una pregunta.
Dani apareció por detrás y los empujó hasta el campo, en el qual se fueron corriendo.
Dani: ¿Estas bien?
Yo: (intente aguantar las lagrimas, pero no pude) No, estoy mal, ¿me odian? Acabo de llegar, ¿he hecho algo mal?
Dani: No, es este Internado.

Dani me cogió y me abrazó cuando me di cuenta, me habia transportado a una montaña.

Yo: ¿Donde estamos?
Dani: Shht... Eres invisible pero se escucha, te he traído aquí para que veas lo que hace Edward.

Me tapó los ojos y me guió hasta donde estaba.
Me destapó los ojos y vi a Edward, James, Mike, y otros que no se quienes eran hablando alrededor de una hoguera.

Yo: ¿Qué hacen?
Dani: Escucha lo que dicen.

Edward: ¿Donde ha ido Dani?
Mike: Le he mandado a buscar a tu novia, que la llevará a la habitación.
James: Siento decirte esto pero, tienes que romper con ella si no quieres perderla.
Edward: Jamás, puedo protegerla.
Mike: ¿Te acuerdas de la caja que le di? Espero que no la haya abierto, porque si no...
Edward: ¡¿Qué pasa si la ha abierto?!
Mike: Primero le debe salir una quemadura en el brazo, lo siguiente es que se desmaye a menudo, después querrá salir al bosque y comerse algún animal para poder alimentar el bicho que lleva dentro y lo siguiente... (suspiro) la muerte.
Edward: ¿Cómo se mata ese bicho?
James: Hay que matarla o transformarla.
Mike: ¿Ha abierto la caja?
Edward: Se desmaya bastante, y tiene una quemadura en el brazo.

《De repente aparece Dani》

Edward: ¿Donde estabas?
Dani: Ayudando a tu novia, estaba con Austin y Axel.
Edward: ¿Esta bien?
Dani: No creo...

Yo, llorando, dejé de ser invisible

Edward: ¿Cómo has podido, Dani?
Dani: Se merecía saber la verdad.
Edward: ¡Pero no así!
Mike: Victoria, lo siento...
Yo: ¿Qué me vais a hacer? ¿matarme?
James: Nos seria imposible matarte.
Edward: Tu decides lo que quieres, ¿morir o ser uno de nosotros?


Los secretos de la cajaWhere stories live. Discover now