SEXO COMPRO, SEXO VENDO, SEXO ARRIENDO (JiCheol)

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De seguro conocen el significado de la luz roja fuera de una casa en un barrio clandestino. A este lugar es frecuentado por mayormente hombres solteros, solitarios, casados, en pareja, necesitados o simplemente para buscar diversión

Jihoon era un chico de 22 años que no tenía idea qué hacer con su vida, había probado varios trabajos en dónde no le agradó ninguno, sin embargo no era excusa para no trabajar, se desempeñaba como vendedor en una tienda punto de una gasolinera

Jihoon estaba soltero, había intentado relaciones donde no duró demasiado, en su defensa no era lo que esperaba o se aburría fácilmente. Jihoon es hetero

¿Lo bueno de su trabajo? Jamás se congestionaba de gente a menos que fuera verano o época de vacaciones, los clientes no eran demasiado exigentes y podía estar relajado la mayor parte de su turno, ¿Lo malo? La mayoría de la clientela iba a comprar específicamente condones y lubricantes

Él también era una persona y con necesidades, llevaba bastante tiempo sin estar con alguien y que fueran únicamente a comprar condones le despertaban sus ganas

—Hola Jihoon —SoonYoung era un cliente habitual, pasaba casi todos los días para comprar golosinas y bebidas energéticas, trabajaba como conductor de transportes, era el único quien Jihoon se atrevía a decirle amigo

—Hola Soon —Anticipó su compra pasando el paquete de preservativos por caja

—Que bien me conoces amigo —Sonrió tomando su compra —Hoy veré a Minghao

—No quiero saber tanto —SoonYoung tenía novio hace tres meses, era abierto en ese tema aunque sabía que a Jihoon no le agradaba escuchar sus historias homo

—Le daré saludos de tu parte ¿Seguro que no quieres unirte? —Le guiñó un ojo molestándolo

—Soon, soy hetero —Su amigo solo chisteó

—¿Por qué siempre te niegas? Si te dejare ser activo

No alcanzó a preguntar cuando un muchacho se acercó a él pidiendo preservativos de una manera muy amable. Jihoon los buscó rápidamente, con la conversación de SoonYoung no se dio cuenta en qué momento había entrado, el muchacho los pagó, agradeció y se dio media vuelta

Jihoon suspiró molesto —También vendemos otras cosas aparte de condones, idiota —Bufo en voz baja pero por desgracia el muchacho si alcanzó a escuchar

—¿Disculpa? —Se giró para mirarlo fijamente, tenía ojos grandes y labios gruesos, Jihoon quedó perplejo por la acción, no se lo esperaba

—No dije nada, hasta luego —Le hizo una leve referencia

—Hoon —Le habló SoonYoung sacándolo de su trance —¿No te vas a unir?

—Te dije que no soy gay

—Entonces buscate una novia porque pareces necesitado —Se ganó una mirada de odio de parte del pequeño, no le quedó más remedio que sacar su celular y buscar algo para él -Dicen que no es caro —Habló mostrándole la pantalla del teléfono

Jihoon fruncio el ceño —No iré por servicios de sexo

Durante toda la tarde fueron al menos cinco personas más a comprar lo mismo, estaba desesperado, tenía la idea de atraverse a visitar ese lugar cuando su turno acabara

Y así fue, llegó tímidamente, pasó a una habitación en donde  pudo sacarse toda la tensión que llevaba encima, sin embargo una vez todo terminó, volvió a sentir ese vacio en su cuerpo que siempre estaba ahí después de. Por más que trataba no hayaba la forma de quitarse esa sensación

Se vistió al cabo de unos minutos después de haber descansado un poco, pagó por el servicio para luego salir de la pequeña habitación

Al mismo tiempo que cerraba la puerta vio al chico de la tarde, él al verlo le sonrió, iba a medio vestir, también notó, que a diferencia de él sí había podido disfrutar del servicio

—Hola —Le saludó, ambos caminaban hacia la salida

—Hola —Le respondió Jihoon, trató de desviar su mirada cuando el chico se abrochaba su camisa pero su cuerpo bien cuidado le impedía apartar la vista. Se comparó en silencio. su cuerpo era delgado y pequeño comprendió el por qué no tenía buena suerte para encontrar a alguien

No quedó completamente satisfecho con el servicio, es más le costó concentrarse para llegar a su orgasmo, se preguntaba que era lo que le faltaba