historias cortas jeongcheol

Deja de provocarme...

Ahí estaba de nuevo, sentado en la mesa frente a mi, podría parecer un acto inocente comer fresas... pero no como él lo hacía, poniéndolos lentamente en sus labios mientras sostenía mi mirada...mordía la fresa con una expresión no tan inocente y al acabar relamio sus labios dejándolos húmedos...tan apetitosos, quiero morderlos como él a las fresas...

Odio cuando baila con alguien más, las luces centellantes sobre él... ligero sudor por su rostro, la música lenta y mientras se mueve gracilmente con sus manos firmes en la espalda de su acompañante y su mirada fija en mí...si sigue haciendo esto...me volveré loco...

Lo veo abandonar su mesa...yo también dejó la mía, necesito hacer que se detenga...que deje de jugar a mi alrededor...

Lo veo lavarse las manos, me acerco a él, lo tomo por la cintura y lo pongo contra la pared, tal vez soy un poco brusco pero no me importa...

- deja de provocarme o no podré controlar lo que te haré... - puedo sentir su respiración detenerse por un segundo al tenerme tan cerca...

- que haces Seungcheol, déjame ya... - intenta luchar, pero no es lo suficiente como para apartarme...
- alguien nos verá, se supone que no nos conocemos... - ahora mismo no me importa, no me importa nadie más en este lugar.

- me provocas y ahora quieres huir?... - lo volteó hacia mi, gime al sentir mis labios en su cuello y mis manos bajo su ropa, su piel es suave, ejerzo un poco más de presión, tendrá marcas... pero no me importa...y sé que a él tampoco.

- Cheol...mmmg...basta - lo miro directo a los ojos, intenta apartar su mirada - nuestras familias se odian, tus padres quieren ver a mis padres derramando lágrimas  sobre nuestra empresa en ruinas... - su voz es un susurro ahora... puedo ver la tristeza en sus ojos, lo sé, sé lo que ellos quieren... pero lo que yo quiero...

- las únicas lagrimas que quiero ver en ti, son las que derrames mientras te hago mío y te des cuenta de que nadie puede amarte tanto como yo lo hago - él es todo lo que deseo, incluso si tengo que ir contra mis padres y los suyos lo haré...

- tus padres...te odiarán - sus labios tiemblan ligeramente y sus hermosos ojos se llenan de agua...a punto de desbordar por mis caricias y sus palabras...

- haz que valga la pena... -  nuestros labios chocan desesperados, ansiosos, mi mano va a su nuca, devoró sus labios, hace un débil intento de separarse pero no se lo permito...
El deseo de ambos es más fuerte, lo hago gemir y con esto mi lengua puede navegar tomando el control de la suya, saborear cada parte... sentir su lengua enredarse en la mía... sentir su cuerpo temblar de deseo...