Lagrimas

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Al llegar a su casa se encontró con todas las luces apagadas, al entrar y presionar el interruptor tomo conciencia del error que cometió al no fijarse en el día y la hora(mucho más de la media noche ahora), estaba cansado incluso para pensar en ello, no obstante el agotamiento cambio a algo diferente al fijar su mirada en la mesa todavía puesta, los platos no habían sido movidos, así como las copas, ni siquiera el jarrón y las flores o las velas ya apagadas; incluso estaba el vino reservado para una ocasión especial (un aniversario) que no se llevo a cabo...todo permanecía bellamente sobre el elegante mantel.

Se maldijo mentalmente, desde unos meses atrás había permanecido prácticamente encerrado 24/7  en la oficina, necesitaba estar ahí ya que un importante proyecto fue dejado a su cargo; sin embargo había prometido a su esposo llegar a casa para la cena (esta cena)...simplemente se mantuvo inmerso en el trabajo, el tiempo paso muy rápido...demasiado.

La culpa aumento al ver a su apuesto esposo dormido en el sofá, al parecer había estado esperando su llegada ya que todavía tenía puesto un elegante traje nuevo - ¡carajo! - maldijo nuevamente, no era la primera vez que no podía cumplir con su palabra y lo peor de todo es que hoy era diferente, era un día que su esposo consideraba valioso y no era que él no...pero el contrato que estaba tratando de cerrar era el más importante para el proyecto, por lo tanto para la compañía era lo mismo; no podía dejarlo a un lado por una cena o cualquier otra situación...simplemente no podía.

Ya encontraría una manera de compensar este desliz (un buen regalo), cargo a su esposo con mucho cuidado para llevarlo a la habitación, utilizó la mayor delicadeza posible al instalarlo sobre la suave cama; suspiró mientras admiraba el contraste de la piel pálida y las sábanas celestes, se abstuvo de darle un beso prefiriendo darse un baño adecuado antes de encerrarlo en sus brazos por el resto de la noche. 

El agua caliente relajo algunos de sus músculos tensos, estar tanto tiempo frente al computador estaba trayendo consecuencias; cuando el vapor del agua se disipo se dio cuenta de los mechones de cabello desigual y las ojeras pronunciadas en su reflejo; tal vez era hora de pedir vacaciones, nada mejor que un pequeño escape bien merecido para compartir con su amado, así le otorgaría el tiempo y el cariño que merecía.



- ¿cariño? - se sorprendió al ver a su esposo sentado a la orilla de la cama su rostro tenía una clara expresión de enojo, respiro profundo para aceptar la reprimenda - lo siento - se disculpo al no recibir ni una sola palabra, se miro los pies avergonzado por arruinar un día tan significativo y al levantar la mirada se encontró con esos ojos llenos de tristeza y decepción, entonces sintió un verdadero pesar en su interior, antes de ofrecer una explicación gotas cristalinas ya rodaban por las mejillas de su marido.

 Estaba a punto de entrar en pánico con las lágrimas que se precipitaban fuera de esos bonitos orbes; para ser honesto lo común en esta situación era una lista de quejas, unos cuantos gritos, tal vez algún objeto volador en su dirección y muchas malas palabras (que en general merecía); no un mar de lágrimas, porqué sinceramente no sabía que hacer con ellas, su esposo casi nunca se expresaba con llanto o sentimentalismos, menos frente a él...por lo general una pelea fuerte llevaba a una reconciliación rápida y dulce o al menos así había sido siempre o eso creía.

Escucho un balbuceo inentendible entre el llanto, así que se acercó con cuidado - ¿Hannie? -

- ¿mm...me...es...tas.....engañando? - las palabras salieron estranguladas por el llanto y en tono adormecido a causa de sollozos emergentes.

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⏰ Última actualización: Feb 01, 2021 ⏰

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