{En edición}
"Las cosas que mas tememos ya nos han ocurrido en la vida" ~Robin Williams.
El frio viento nocturno de finales de invierno tocaba suavemente mi delicada piel expuesta por la ventana, algunos dirían que mi piel era de un tono acaramelada como los dulces que se disolvían en las bocas de niños en halloween, otros dirían que era blanca como un lienzo de papel esperando a ser pintado por colores indiferentes, otros decían que era rosada como un pastel relleno de crema, algunos que era negra como la oscuridad que reina en el espacio exterior, pero yo la verdad la veía verde como hojas en primavera o aveces rojo como la sangre de aquella cabra la semana pasada...a mi la verdad tampoco me importa mucho, ni la cabra, ni el color de mi piel, o de mi pelo, o de mis ojos, al final todos somos un saco de huesos blancos....o talvez negros cubiertos por carne que servirá de alimento a las criaturas. Aquella fria noche tenia cierta personalidad que me agradaba, el olor que se desplazaba por los aires hasta llegar a mis orificios nasales era una combinación de sopa de carne con el peculiar olor precedente de la lluvia, eso me indicaba que pronto las nubes se juntarían hasta tapar el sol y descargarían todo su llanto sobre la tierra orgánica, los salados y agitados mares, los dulces rios, las ruidosas y pesadas ciudades y los misteriosos y alejados pueblos....el mio era uno muy peculiar, situado en irlanda del norte, en algún lugar insignificante que probablemente la mayoría no conozca, estaba formado por unas 37 casas, una seguida de la otra como si fuesen un patrón de seguridad, cada una con una personalidad diferente, estas eran situadas en medio de un gran campo vacío... bueno... lleno en realidad de plantas, insectos, restos de cadáveres... talvez algun loco o mendigo que no tomó buenas decisiones en su vida ni tenía nadie que le aconsejara, nisiquiera un familiar o inclusive un amigo, eso me hacía pensar en salir mas a menudo al mundo exterior, si es que se le puede llamar "salir y explorar el exterior" a unas cuantas calles estrechas rodeadas de casas con algunos metros de tierra, pero la verdad es que había mas de lo que yo pensaba, o eso me dijo aquel duende de aspecto tenebroso y fantasmagórico con una peculiar cola de serpiente y ojos verdes tan profundos como la selva amazónica...no es que hubiese estado en ella, ya que con suerte y habia salido a comprar el pan en aquel puesto de aspecto medieval con aquel hombre gordo y alto de unos 89 años con piernas cortas y largo cuello con venas marcadas, una cabeza reluciente con cuernos formándose si excluimos algunos espacios de cabello blanco que se hacían espacio entre sus orejas, era un tipo agradable quitando el hecho de que le gustaba masticar pimientos habaneros los cuales le provocaban un aliento tan fuerte como el fuego del infierno y denso como la niebla de algún pueblo terrorífico de película de terror que claramente no era el caso de mi...nuestro pueblo, este viejo panadero solía contarme historias de su juventud mientras me dejaba comer las sobras del dia anterior, no sabia si creerle o no, es decir, si las historias eran ciertas o no, pero claramente eran muy emocionantes y entretenidas. Lo cierto es que necesitaba conocer personas nuevas o para ser mas específicos, hacer amigos...o para ser todavía mas específicos hacer amigos humanos.~Continuará...

ESTÁS LEYENDO
El Ático~
HorrorApenas comienzo a escribir esta pequeña historia que espero que les guste, no tenía pensado publicarla tan temprano pero he decidido hacerlo así para ver qué opinan las personas sobre esta. No les daré muchos detalles sobre la historia, simplemente...