❀Siempre Fuiste Tú❀[Todoroki y Tú]

S e g u n d o.

Entré en aquel gran lugar,admirando cada centímetro que mis pies recorrían con la mirada.

Aunque todo estaba repleto de estudiantes solo podía fijarme en las maravillosas vistas que había desde el piso en el que me encontraba.

Fue entonces cuando recibí un empujón por la espalda.
Iba a pedir disculpas.

Pero ante aquella fría mirada me quede helada.

Yaoyorozu Momo

Esa chica que me había hecho la vida imposible desde primaria me dedicó un fría sonrisa.
Yo hasta la edad de 10 años no conseguí mi kosei, incluso por su culpa...perdí la esperanza.

-¡Qué bueno volver a verte Aizawa!-me sonrió y siguió caminando.

No parecía mala chica. Pero no se había disculpado por todo lo que me hizo.
Eso me dio a entender una única cosa.
No se arrepentía .

Decidí seguirla hasta el patio trasero del colegio.
Donde pude observar a aquel chico que me había salvado la vida.
Pronto se fue.

-Puedes salir... -escuché decir a la pelo color azabache.

Me acerqué con el paso lento. No me fío.

-¿Estás muda...? ¿o algo? -preguntó sarcástica.-Todoroki tiene algo tuyo y me estaba preguntado por ti, no me interesa...Pero él si me interesa. -dijo clavando una seria mirada en mis manos temblorosas.

Ante aquello, ella sonrió.

-Si él te gusta... Más te vale olvidarte, o te costará caro.-habló sin reparo. -

No respondí, sabía que era inútil.

-Que mala suerte.Me tenías que tocar tú como rival amorosa... -mencionó frustada.

¿Rival amorosa?Creo que lo correcto sería enemiga.

-Puedo leer tu mirada. Porque no hablas en absoluto.No me consideras rival.-dijo cerrando los puños.

Conocía aquel estímulo.
Di unos pasos hacía atrás, pero nada evitó aquello.

-¡Ten mucho cuidado con lo que le haces a ese chico! Porque retrasmitirá en tu puta cara!-gritó justo después de darme un fuerte golpe en la mejilla.

-¡Una inútil villana como tú no va a robarme a un chico! -aseguró.-De cualquier modo Shõto solo será para entrenerme.-susurró creyendo que yo no lo escucharía.

Me resultó increíble que alguien con una sonrisa tan sincera(o eso parecía) pudiera ser tan falsa.

-Ni siquiera serías capaz de ganarme, alguien como tú sin un kosei...-dijó si pensar .-

-¡Qué no conozcas mi kosei no significa que no tenga! -afirmé.

Aquella pelinegra se giro sin ningún tipo de pena y caminó, alejándose de mí.

-Mi kosei es crear, si te metes en un territorio que no es tuyo, te crearé ganas de morir.-dijo y siguió caminando.

De nuevo entendí una cosa.
Ella no iba a parar nunca.
Pero está vez, yo no iba a llorar.

Entré de nuevo en el edificio arrepintiendo que haber entrado.
Pero está vez estaba vacío.

Revisé cada clase pero no llegué a hallar nada ni nadie.

Pronto llegué a una sala con voces. Peto antes de poder entrar un peliverde salió asustándome.

-¡Jo...lín! -dije evitando decir una bulgaridad delante de un chico que aunque era de mi edad. Sabía que trataría como mi hermanito. -¡Midoriya me has asustado...!

-Shh...-señaló para que me callará. -Perdón...-me sonrió cálidamente en un susurro.

De repente su cara se tornó seria e impresionada.

-¿Y ese golpe? -preguntó señalando mi mejilla la cual estaba roja.

-Soy algo torpe...Resvalé bajando las escaleras y pues,aquí la muestra... -me inventé de manera original.

-¡Ten más cuidado no me gustaría que te hicieras daño! -hizo que me sonrojara el peliverde por lo dulce que era. -¡Eres la hija de Aizawa! -soltó sin venir a cuento.

-¿Q-Qué? No...Él es mi tío, vivo con él, por eso me apellido como él.

-Ah...¿puedo hacer una pregunta algo incómoda? -se sonrojó el chico. -

No le digas que sí...

-Sí... -me arrepentí de haberle aceptado,sabía bien la pregunta.