el octavo pecado capital

capitulo 7

Capitulo siete: una promesa rota

Despues de derrotar a varios títeres de armadura, lyn estaba segura que había recuperado un poco más sus fuerzas, una extraña aura negra se esparció por el cielo

-esto es...- hablo preocupado Arthur

-si... este es el poder del capitán, te lo tenías bien guardado- rio leve la chica .-eres increíble capitán

Al mismo tiempo que sentía como el poder destructivo del capitán iba en aumento, este a su vez apareció ante los otros diez poderes parecidos

-retiro lo dicho- la chica se mostró molesta "como era posible que fuese a retar a los diez mandamientos despues de aquella paliza?"- Pensó – eres un imbécil capitán!!!!

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-hola!- saludo meliodas frente a los diez mandamientos

Una sonrisa burlesca apareció en los labios del rubio al ver a los demonios mirarlo estupefactos

Pero antes de que el capitán pudiese hablar galand ya se encontraba frente a él, mientras que tanto fraudrin como zeldris se mantenían con la guardia en alto

-meliodas!- grito con odio el mandamiento de la piedad listo para atacar

-esperen!- lo detuvo galand- nadie lo va a tocar! Es la presa que permití escapar- rio leve- seré yo quien lo mate!!!!

Antes de que pudiese reaccionar meliodas estampo su puño en la armadura de galand ocasionando así que la parte que protegía su rostro se deformara lanzándolo hacia atrás de manera demasiado sorpresiva

-has cambiado desde la última vez que nos encontramos?- pregunto garand levantándose del suelo- chaotic iudgement!!!

Garand movió su laza en mortíferos intentos de cortar a meliodas, pero lo único que logro fue enviar un sin fin de rocas a los alrededores

-no – meliodas se posicionaba en la parte delantera del arma de garand sonriendo aun-solo he regresado un poco al viejo meliodas

De un movimiento rápido meliodas choco su rodilla en contra del rostro cubierto de armadura de garand para despues golpearlo en repetidas ocasiones

-así es como tiene que ser!!!- grito eufórico garand levantándose de nuevo- no hay otra manera!!!

Meliodas tomo su espada y al mismo instante la dejo caer en su funda, ocasionando que los cortes hechos sobre el cuerpo del mandamiento fuesen evidentes, dejándolo así fuera de combate

-viste eso?- pregunto gloxinia

-va a ser un hueso duro de roer- concordó el mandamiento de la fe

-no me mires así- hablo animado meliodas- solamente vine a dar un pequeño saludo ya que ha pasado mucho tiempo y hablar un poco

Zeldris lo encaro con la mirada neutra intentando que no se notara su enojo

-no hay nada de qué hablar- hablo frio- las únicas cosas que existen es nuestro rencor hacia ti y nuestro deseo de venganza contra los cuatro clanes

-no seas así zeldris- le regaño meliodas- acaso no somos hermanos? No me podrías escuchar al menos? La guerra termino hace mucho, mucho tiempo. Britania esta ahora completamente en paz. Pero si vas diciendo que continuaras desde donde lo dejamos hace tres mil años... los pecados capitales y yo los derrotaremos con todo lo que tengas

-si es así, mándale un aviso de mi parte a lynnia- meliodas se sorprendió del nombre que salió de los labios de su hermano- dile que nuestra promesa se rompió hacia mucho, no me detendré hasta habérselo restregado a la cara...