Él es diferente
Claro que no
El cambio
Estas loca
Creo que me gusta
Definitivamente estas loca, ¿Cómo te puede gustar Vegeta?
Bueno.. No se
¿No te gusta?
N.. pues Si pero emm. No sé
–Baja de las nubes Bulma– Levante la vista de mi comida y observé a mi madre– ¿En qué piensas?
–Nada– ella rio junto a mi padre
–¿Algún chico?– pregunto la señora Ouji–
–No– mire a Vegeta y él estaba concentrado en su celular–
–Como digas– dijo mamá quitándole importancia– ¿Y tú Vegeta?– el alzó la vista confundido
–Respóndele a la señora Brief Vegeta– le susurró su madre
–No, no hay ninguna chica–
Rei suavemente al sentir como su mano hacia caricias en mi muslo
–Tenemos buenas noticias– dijo la señora Ouji después de unos segundos– Mañana mismo podremos ir a nuestra casa, osea que ya no tendremos que vivir con la agradable familia Brief–
Al escuchar sus palabras sentí algo muy raro en mi ¿Tristeza?
¿Pero por qué?¿Por Vegeta? ¿Por Milk?
–Eso es una exelente noticia– dijo mi padre levantando una copa con vino– Brindo por los lazos que se generaron con esta convivencia– todos brindamos con una sonrisa, pero la mía era falsa, y no sé porque
–Es una lastima que no puedan quedarse asta la celebración de los tantos años de la corporación cápsula– dijo mi madre con tristeza
–No– susurré a Vegeta al sentir que quería acariciar mi estómago
–¿Dijiste algo Bulma?– pregunto mi padre con una sonrisa
–No papá– él sonrió y le dedicó nuevamente su atención a mi madre y a la señora Ouji
–Pero con gusto vendremos a la fiesta, es lo menos que podremos hacer por ustedes– mi madre abrazo a la señora y luego al señor Ouji
–Y es más que obvio que sus hijos tienen que venir con ustedes– ellos siguieron charlando pero empecé a ignorarlos ya que su conversación no me importaba en lo más mínimo
(…)
De noche
En todo el día evite a Vegeta y él al parecer se a dado cuenta ya que todo el tiempo está tratando de que quedemos solos, no es que le tenga miedo a el, lo que me da miedo es lo que siento por el
Milk sospecha de que me pasa algo pero no me conoce lo suficientemente como para saber lo que me sucede. Ella piensa que es por Yamcha y en cierto modo tiene razón
– ¿Y tú qué dices? – pregunto Milk con dos vestidos en mano
– ¿Que?– pregunté desconcertada
–Nunca me escuchas Bulma– gire los ojos y me acerque a ella, agarre el vestido violeta y lo tiré al suelo
–El violeta te deja como niñita– ella agarro el vestido que tire al suelo y lo guardo en una caja– Usa el amarillo que te regalé en tu cumpleaños, el amarillo resalta tu cabello negro y tu piel blanca– ella sonrió contenta y me abrazó
