Vegeta salió de la casa y yo cerré la puerta con seguro, ¿Por dónde rayos entro?
Camine asta mi cuarto y me acosté en la cama, cerré los ojos para seguir con mi sueño embellecedor pero al parecer el mundo decidió estar encontrá de Bulma el día de hoy
–¡Hola cariño!– tape mi rostro con la almohada– ¿Por qué te fuiste tan temprano de la fiesta?, Todo estuvo super genial, tu padre no pudo disfrutar mucho de la fiesta ya que cuando tú te fuiste el tubo que encargarce de los periodistas y los empresarios que querían firmar con el –
–¿Qué hora es mamá?–
–Las seis en punto cariño– ¡No! – Tienes que ir a ayudar a tu padre al laboratorio
–En un minuto voy –
(…)
–Hola papá– lo abraze desde atrás–
–Hola Bulma– sonreí y me senté en su escritorio
–¿En qué t..
–¿Estas bien pequeña?–
Sentí mi estómago dar vueltas y vueltas
–¿Princesa?–
De un momento a otro las ganas de vomitar se apoderaron de mi. Corrí asta el baño del laboratorio y dejé caer mis rodillas enfrente del retrete
¿Qué rayos me pasa?
Después de unos minutos me levanté del piso y lave mi boca
– ¿Estas bien princesa?,¿Quieres ir al hospital?, Mejor sube y descansa–
–No papá, fue solo cosa de un momento, además quiero distraerme un rato–
El trato de hablar para protestar pero yo coloque mi mano en su boca
–Ya hable papá, no hagas que me enoje–
–Esta bien– sonreí contenta– Pero si vuelves a sentirte mal te largas –
(…)
–Ya tengo listas las máquinas ocho y la cuarenta, tenían un error de cableado–
–Muy bien, ahora quiero que prepares treinta cajas de cápsulas para la ciudad norte– abrí los ojos como platos, ¿Treinta cajas?–.
Empecé a preparar las cajas y de un momento a otro todo empezó a dar vueltas, la vista se me nublo y tuve que sostenerme de la mesa metálica para no caer al piso
¿¡QUÉ RAYOS ME PASA!?, Estos ridículos mareos ya me están pasando de seguido y ya se está volviendo molesto
Debes estar cansada y estresada
Si, debe ser eso, mejor le hago caso a papá y voy a descansar un rato
–Papi– el levantó la vista– Voy a descansar a mi cuarto, me siento muy mal–
–Esta bien princesa, pero mañana no te salvas– camine asta mi cuarto y con mucha alegría me acosté en mi cama
(…)
–¡Maldición! ¿¡Es mucho pedir querer dormir!?– agarre mi teléfono y conteste a la molesta y desconocida llamada
Comienzo de Llamada
–¡Que mierda quieres!–
–Perdón si molesto Bulma– la quebradiza voz de Milk se escuchaba desde el otro lado de la línea –Mejor hablamos otro día–