"Vendido por Amor"

Feliz cumpleaños

Pasaron unos días y la relación entre jefe y "asistente" era más cercana. Entre momentos libres dentro de la oficina se daba el pequeño juego de besos y caricias entre ellos.

Nadie sospechaba de esa relación furtiva más que el pelirrojo Grell y el chico sombrío Violet que miraba como su amigo andaba más perdido que antes. En algunas ocasiones se reservaba sus comentarios para no incomodar al joven ante su situación tan complicada pero aún así no estaba de acuerdo.

Ciel llegaba de trabajar en la noche y se encontró con un par de maletas empacadas.

-¿ Y eso? -

- Me salió un pequeño contratiempo y tengo que viajar mañana mismo para encontrarme con mis hermanas mayores - respondía algo decaído Soma.

- Lamentamos irnos en este momento pero si no fuera tan importante no lo haríamos - hablaba Agni haciendo una reverencia en señal de disculpa.

Rachel que estaba sentada en la mesa se sentía más angustiada pues esos jóvenes eran una buena compañía para su hijo y a 2 días de ser internada ahora tendrían que viajar dejándolo solo.

- Bien no puedo decir que no se vayan, trata de comunicarte si es que pasa algo importante - Ciel se sentaba en la mesa algo cansado.

- No te preocupes, trataré de arreglar mis asuntos y regresar pronto - el joven hindú lo abrazaba efusivamente dejando salir unas lágrimas como era su costumbre.

Cenaron por última vez juntos y se fueron a la cama. Muy temprano ambos hindús salieron de casa despidiéndose de Rachel y Ciel para ir en dirección al aeropuerto.

Algo deprimido el ojiazul guardaba sus cosas para ir al trabajo. Nuevamente solo eran ellos 2 en esa casa a excepción de Lizzy que los visitaba algunas veces.

Pasaba al centro comercial para cambiarse el uniforme y la peluca. Lo único que le hacía sentirse bien en esos instantes era saber que tenía una "relación" con Sebastian. Sonrió un poco al mirarse al espejo y encaminarse al trabajo.

Llegó temprano y se acomodó en la oficina. Empezó por encender la computadora y seguir con el trabajo que dejó pendiente.

- Te ves algo triste, paso algo? - murmuró el joven pelinegro con un vaso desechable lleno de café.

- Nada en realidad...- desviaba la mirada.

- Vamos "Cielo" sabes que puedes confiar en mí - sonrió algo burlón entregándole el vaso de café.

- Eres fastidioso cuando quieres serlo...pero gracias por el café -

Violet se sentaba en el sillón mientras no llegaba Sebastian, no tenía buena comunicación con él y tampoco le agradaba del todo. Solo tenía intereses sobre el joven phantomhive aún después de saber el secreto que guardaba.

- Los chicos que vivían conmigo hoy mismo se fueron a su país natal nuevamente...solo mi madre y yo estamos como en el principio, solos - suspiro amargamente.

- Y tu mayor preocupación es que en 2 días será su intervención? -

- Si, quizás estoy nervioso pero contaba con el "apoyo" de esos dos tontos al menos...ahora no se - recarbaga sus brazos sobre el escritorio.

- Y que hay de tu querido Sebastian -

- El sabe poco, además es obvio que no puede estar presente...sabes porque -

Violet suspiro resignado y dió una palmadita en sus hombros, mirándole de forma tranquila.

- No hagas berrinches, yo te acompañare -