(Medio día, cielo nuboso pero clareado, Gwinette y Kahl se bajan del auto y se reúnen con Usher al interior del comedor).
Nos dirijimos a la puerta y Gwin la cruzó primero, haciendo sonar la típica campanilla de un restaurante clásico, apresurándose para llegar la barra de los briagos donde esperaba inquieto nuestro camarada. -¡Usher! -Gritó la mujer mientras abrazaba su espalda y lo sacudía en su banco. -¿Gwi? - Preguntó incrédulo el sujeto, al mismo tiempo que trataba de voltear el cuerpo.
-Claro que soy yo idiota; ¿Quién mas te entierra los senos en la espalda mientras te abraza?, Y no, tu madre no cuenta. -Esas palabras articuló la mujer, al mismo tiempo que lo soltaba y se sentaba a su lado.; después de la escandalosa escena finalmente alguien notó mi presencia. -Es bueno verte viejo, por un instante pensé que te habías puesto pechos y querías llevar nuestra amistad al mismo nivel que la tienes con Gwin...-Dijo Usher al verme tras de ellos, soltando una leve sonrisa al final de la oración. -Si esa fuera nuestra relación tu serías el de los senos, puesto que tus bolas ya se han caído ya que no pareces progresar con Autumm. -Respondí; a consciencia de lo que acababa de causar... -¡¿QUE?!, me largué por tres meses al otro lado del Atlántico, ¿y me recibes soltero? Dios Usher! Yo ya esperaba sobrinos, o al menos verte en traje; pero Kahl tiene razón, a este paso TU serás quien use el vestido, ¡y ni siquiera en la boda!, seguramente ya lo haces a escondidas en tu recámara mientras tus hermanas no encuentran que ponerse.
¿Qué sucede contigo? ¿No has aprendido nada de tus mejores amigos ? O qué ca....-Gwinette siguió su sermón/regaño/lección, así que mis amigos "anular" y "medio" tuvieron que intervenir en sus labios para poder cerrar su boca, aunque el riesgo era una trampa mortal llamada entre pierna, sin embargo, puedo decir que es una de mis mejores movidas... -¿Es que acaso quier..e.. Mmmmm... Aldito Kahl! -Del placer al odio en un instante, primero fue un gemido, y después una bofetada enrojesedora de mejillas; pero la hice callar... -¿Qué te sucede?, este hombre está bien baboso y necesita que alguien le diga lo que estaba... Diciendo... -Ella se tranquilizó un poco y su rostro se pintó ténuemente ruborizado de rojo, así mismo recuperó el aire.
-No hay nada que puedas decirle que no le haya dicho yo, no tiene remedio, pero yo ya tengo la solución para la frustración que me provoca su situación... - Les dije sonriendo mientras sacaba la cartera y lamía los dos dedos que casi perecen en la entrepierna de ella. -Aja y cual es...?- Replicaron al unísono mis compañeros. -Llamas a un superhéroe, y justo ahora el más cercano parece ser barman y nos rescatará con un trago de su mejor botella, ¿No es así Jeann?, también manden a traer por el camarero y coman hasta saciar sus negras almas, yo invito; y ya dejen de pelear, que somos el uno, el dos y el tres y no nos hemos reunido en más de un.mes. -Los tragos fueron servidos y a salud de nuestro reencuentro los bebimos, minutos posteriores la comida arribó a la mesa y a nuestros estómagos, bebimos y comimos hasta saciar, según recuerdo nos quedamos allí un buen tiempo, Gwinette nos relató su ninfómano viaje por Europa, sus aventuras y desventuras, a pesar de haber viajado por turismo, ciertamente conoció mas braguetas que destinos, pero en realidad, ese es su lugar favorito, así que parecía haberlo disfrutado, era bueno verla feliz, por el contrario, el alcohol reveló lo mal que la estaba pasando mi mejor amigo; y como las tinieblas del crepúsculo recién acariciaban el cielo vespertino y el rojo del firmamento se fusionaba con la lumbrera diurna, solo había una cosa que podía hacer por Usher...
-Espero que hayan disfrutado sus bebidas y de la comida, pero me temo que aún no podré dejarlos ir a sus respectivos hogares, hay que celebrar tu regreso Gwin, y... A este sujeto hay que levantarle el ánimo. -Bebí un último trago e hize la propuesta. Luego de hacerlo, Gwinette se paró del comedor y me dijo: -Recógeme a las 8:00 y la casa de Usher queda de paso ¿no?, hasta entonces.-
Pagué la cuenta y salimos del lugar, para hacer unos preparativos personales previos a los planes nocturnos.
Manejé de vuelta a casa con el fin de arreglar mi imagen personal y resurtirme de preservativos, pues a pesar de que suelo acostarme con extrañas, tengo la peculiaridad de velar por el placer femenino antes que el propio y por eso utilizo látex saborizado y con aroma, así la mujer puede disfrutar tanto como desee y sin quedar con mal sabor de boca, todos ganamos. Una vez estuve listo, volví a el auto, la penumbra ya entintaba el cielo con mayor intensidad y el reloj casi marcaba la hora acordada, cuando el tiempo fue propicio, encendí el motor y arranqué hacia lo planeado.
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Kahl Vahx
Short StoryDinero, amigos, mujeres, autos, lujos; cualquiera diría que es capaz de ser feliz con esta fórmula, sin embargo, teniendo todo esto no tienes nada si no hay con quien compartirlo, esta es la historia de mi travesía en busca de una dama de ensueño y...