CAPÍTULO 7

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El dolor era insoportable, había un maldito hueco en mi estómago, literal si alguien me viera podría ver qué hay detrás de mí, podría ver mis intestinos, mi muerte ya estaba escrita.
Cada una de mis respiraciones era más difícil, ya no podía estar parado, sentía mi vida desbordarse entre mis manos.
Violeta, la dejé sola le prometí a mí padre que no lo haría y mira aquí estoy con la muerte acariciando mi cabello sin vuelta a tras, me da tristeza no poder volver a escuchar aquella voz que alegraba mis días, Samantha perdón, en mi corazón prometí que te volvería a ver, que volvería a escuchar tu voz pero la vida me está siendo arrebatada. Me siento la peor persona en este instante he roto muchas promesas, mi padre, violeta, Samantha.

Mi cuerpo caía al frío suelo, mi vista se estaba nublado al igual mi oído se estaba apagando, podía escuchar a lo lejos una pequeña voz, una voz suave en este punto es irreconocible, puedo ver cómo se acerca corriendo, veo sus piernas acercarse, son pequeñas, no deja de repetir mi nombre una y otra vez junto con las palabras "quédate conmigo", "vas a estar bien", "no te vayas por favor".
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Hay mucho silencio en mi interior, todo es negro aquí, puedo visualizar a una mujer sentada en el fondo de este largo pasillo, parece esperar mi presencia frente a ella.
Todos los pasos que doy parecen ser infinitos por más que camino o corra no llego a dónde está ella.
La mayoría de su rostro es tapado por la oscuridad de la habitación, pero una pequeña lámpara situada en la parte de arriba en donde debería aver  un techo alumbra la parte baja de su rostro y un poco de su cuerpo, aquella chica tiene los labios pintados color rojo intenso, un rojo tan fuerte como la sangre, su cuerpo está semidesnudo solo hay una manta en sus piernas dejando expuestos sus pechos.
Al ver mis intentos de llegar a ella logro distinguir una sonrisa que se forma en aquellos labios de color llamativo. Aquella voz me atrae, una voz grave pero dulce a mismo tiempo, esa voz, la conozco y no sé de dónde, cada vez que la trato recordar me duele la cabeza y puedo sentir temblar todo con esta acción, ella nota mi sufrir y mis intentos de recordarla y se ríe al ver que todos aquellos intentos son frustrados. Puedo ver todo desvanecerse a mi alrededor y aquella sonrisa sigue plasmada en esa chica mientras se despide de mi y dice esperar volvernos a ver.
Mi mente es un lío, me estoy dando cuenta que mi vida es un rompecabezas y aquella pieza de mi infancia y recuerdos de mi familia fue robada, no está y no logro comprender por qué, pensándolo bien no recuerdo nada de mi infancia, solo un poco de mi adolescencia, ¿Donde quedaron mis recuerdos?.
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Día: desconocido, mes: diciembre hora: desconocida.

Logro despertar de lo que fue una pesadilla, me encuentro recostado en la cama en donde dormí con violeta, mi cabeza parece que va a explotar, duele de una manera increíble, sin pensarlo dos veces llevo mis manos a mi abdomen para sentirlo y asegurarme que lo que pasó solo fue una pesadilla, pero en mi abdomen hay un pequeño agujero, ya no es como antes ahora sólo está perforada las dos primeras capas de piel, es grande aquel agujero o bueno lo que queda del, ahora sólo parece que me queme por la falta de piel, bajo mi camisa pero está si trae un hoyo en donde estaba el gran agujero por suerte queda el hoyo en la playera por qué si no al bajarla me hubiera dolido como mil demonios.
Me paro rápido de la cama, mis piernas tiemblan a cada paso, mis fuerzas son nulas, no responden mis piernas como deberían de hacerlo.
Mi mente, mi maldita mente no puede procesar todo lo que acaba de suceder, al ver que mis fuerzas son en vano me siento en el borde del suelo en donde puedo descansar, aunque ni comprendo por qué me siento tan agotado al igual que no comprendo cómo es que estoy vivo, no me imagino cuánto tiempo e estado acostado, no comprendo que es lo que carajos sucedió, en mi mente solo puede recordar lo último que ví, a la última persona que ví...
Justo en ese momento obtengo fuerzas de una manera desconocida para poder levantarme y poder ir a buscar a violeta, sentía que mi corazón se me salía pues no sé cuánto tiempo e estado inconsciente y no sé si siquiera está bien, mis piernas tiemblan pero no son mi impedimento para poder correr a la puerta, justo en ese momento que estaba enfrente de aquella puerta color hueso la perilla gira y se abre la puerta de olor húmedo dejando ver aquellos ojos verdes de violeta, violeta deja caer aquel traste lleno de agua caliente y en el una toalla color blanca, corre a mis brazos dejando que yo suelte un pequeño quejido pues el vientre todavía me dolía.
Ella no lograba entender cómo es que yo estaba de pie, empezaba a tartamudear y de la nada salen aquellas lágrimas de sus ojos, todo estaba pasando muy rápido, no comprendo nada de lo que está pasando, si es que yo moría ¿Ella seguiría cuidando de mi cadáver como alguna desquiciada que no acepta la muerte ?.
Trato de tranquilizarla pues mi piernas no logran soportar su peso y el mío al igual que mi abdomen al tener contacto con su ropa pues mi "herida" está expuesta al aire libre, ella de alguna manera entiende mi lenguaje corporal el cual consta de hagarrala de los hombros y tratarla de alejar. Sus ojos llenos de lágrimas indican que su boca no puede pronunciar ninguna palabra y a si es no lo puede hacer.
Mi primera pregunta, aunque es errónea la formuló.
-¿Cuánto tiempo llevo inconsciente ?
-...
Como era de esperarse singuna palabra sale de su boca, simplemente señas mal elaboradas con sus manos me indican que aproximadamente llevo 1 semana y media, aquella noticia me hizo sentir un hueco en mi estómago(no tan grave como el que llegue a tener) pues no sé cómo es que violeta se ha sustentado sola, la verdad no entiendo nada.

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