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Amanecía un nuevo día con un sol radiante que iluminaba hasta los sitios mas recónditos de la ciudad.

Se abría así un nuevo día para Martín que como cada día se levantaba a las 7 de la mañana para ir al trabajo. Se me había puesto su corbata y su camiseta roja de la suerte y bajo a la cocina a desayunar donde le esperaba su mujer.

-Hola cariño como estas?- preguntó su mujer muy contenta

- Muy bien cariño, un poco cansado pero todo bien- dijo Martin

Martín acabó de desayunó y se encamino hacia la puerta puerta para irse al trabajo no si a antes darle un beso a su esposa.

Era la primer día de l nuevo curso y Laura que aunque una chica pesada y pija era u genio e iba muy adelanta a sus compañeros tanto que sus profesores decidieron adelantarla un curso.

- Era visto que me iban a adelantar un curso, soy una puta genia jaajaja- dijo Laura entre carcajadas.

Pero el año no iba pasar tan cómodo como ella pensaba, en aquel año Laura iba a conocer el amor y el infierno al mismo tiempo

Mientras tanto Lorena estaba en el centro de reparación de robots, examinado un robot que necesitaba ser arreglado con urgencia porque se había estropeado.

-¡Ya está, arreglado!, ya podrás volver a tu hogar con tu dueño- dijo Lidia contenta por haber hecho bien su trabajo

Pasaron las horas hasta que llegó el momento de terminar el trabajo salir para casa, padre e hija salieron juntos, y mientras caminaban hacia casa comenzaron una conversa

-¿Quién era ese muchacho que estaba contigo el otro día, parece un poco raro ¿no?- dijo Martín con tono burlesco.

-No es nadie papá es solo un chico que conocí el otro día en el trabajo nada más me pregunto no se qué del mecanismo de un robot, ya sabes cosas del trabajo, que te voy a contar a ti que llevas toda una vida en este trabajo- dijo Lidia

-Yo creo que hay algo más- dijo Martín riéndose a carcajadas

- ¡Qué va a ver algo no digas tonterías papá, ya te dije que es un chico que conocí en el trabajo nada más me pidió ayuda con un robot, y ya está no hay más vueltas que darle- dijo Lidia dado por cerrada la conversación

Al día siguiente Laura empezaba su primer día de clase en segundo de la eso ya que la había adelantado un curso, un curso que en su primer día pasó sin sobresaltos hasta que todo su mundo se vino abajo al conocer a Lit el nuevo alumno que venia desde las lejanas tierras de Leiga, pelo rizado de color rubio y ojos de color azul, llevaba puestas unas sandalias y un parche en ojo.

Laura se quedó ensimismada al verlo, tanto que no podía ni hablar de los nervios que tenía y mas cuando se enteró de que el único sitio que había era a su lado.

-Hola- Dijo Lit

-Hoo-la-aa! dijo Laura muy nerviosa como si tartamudeara

-¿Que te pasa te encuentras mal, por cierto yo me llamo Lit y tu?-dijo Lit intrigado

-Yo m-e ll-amo Laura- dijo sin poder reaccionar-

-encantando de conocerte Laura espero que nos llevemos bien- dijo Lit en un tono cariñoso y con una sonrisa en la cara.

Cayó la la noche y todos estaban alrededor de la mesa cenando y charlando de que como ,es fue el día, charlaban y charlaban hasta que de pronto sonó la campana del reloj del salón señalando la medianoche.

En ese momento se fueron a dormir a sus respectivos dormitorios.








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