Feed me || Yoonmin [ TERMINADA ]

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La noche ya había llegado y con eso, la brisa cálida de esta acompañado de ese aroma a café que yacía en el establecimiento de donas; El pálido se encontraba esperando su pedido en un rincón, tenía algunos recados de la universidad atrasados, pero valía la pena no hacerlos por ver a su pequeño bombón feliz, y desde cuando se tardaban tanto en hacer una docena de donas! Lo estaba volviendo loco esperar tanto, hasta que por interrupción del cielo pasó

  — Min..Yoon..Gi...! Su pedido está listo! — avisó la voz de una joven al parecer era nueva en el negocio 

— Aleluya! — aludió el pálido

— Gracias por su compra y vuelva pronto!~

— Si bueno, adiós

El chico salió con bolsa en mano faltaban 3 cuadras hasta llegar a la pequeña casa que compartía con su pareja, algo minimalista y confortable especialmente cuando los deliciosos caprichos del bajito se horneaban , eso inconscientemente le sacó una sonrisa, su menor podía ser muy ocurrente cuando de postres se trataba o comida en general, pero tampoco era que solo el mayor de ambos cocinaba. Jimin podía sorprenderlo como nunca cuando cocinaba algo hacía que el comer fuera un experiencia única y que más agradable para compartirlo con quien más amas, por otra parte toda la semana había sido su niño quien lo sorprendía y ya era hora que recompensarlo por haber sido un buen niño así que hoy tendría una noche fenomenal y como si fueran capaces de leer sus mentes Jimin tenía una idea de la cual sacaría el máximo provecho esa noche.

  — Huh..—

— Espero no estar tardando mucho bebé...— murmuró al viento

Y como por arte de magia su celular comenzó a sonar, retiró el aparato de su bolsillo y arrastró el icono verde, mostrando luego un "conectando" en pantalla, para finalmente escuchar la voz de su ángel.

— Daddy...?

— Si bebé?

— Falta mucho para que llegue a casa?

— Mmmm...no lo sé, por qué lo preguntas?

—  Minnie tiene hambre..—  dijo con una voz melosa mientras juguteaba con sus deditos

— Uhm..Así que mi bebé tiene hambre..qué podré hacer? —  mencionó sarcástico

—  Yah! Daddy! 

—  Como de qué tienes antojo esta vez?   

—  Donas..?  —dijo suave

  — Vaya que te conozco muy bien~ — soltó una pequeña risa 

  — Lo sabía?! — cuestionó incrédulo

  —   Yo lo sé todo pastelito, ahora, abre la puerta no hagas esperar a daddy — Sonrió ladino

  El pequeño bajó corriendo las escaleras, causando unos leves jadeos en su respiración por la actividad física, pero eso no era nada comparado con la emoción que sentía en ese momento, al abrir la puerta sonrió al ver la figura de su mayor abrazándola en el acto y recibiendo unos brazos alrededor de su cintura, luego una brisa que lo hizo temblar lo sacó de su ensoñación, su mayor se dio cuenta de aquello como que también el menor no llevaba sus calcetines para proteger sus pequeños piecitos de la fría cerámica que recubría el suelo

  — Bebé..— gruñó gulturalmente

— Si papi? — cuestionó el menor con cierta preocupación

— Que te e dicho sobre tus calcetines?  

— Que son lindos? — respondió dudando

— Si, pero...que debes hacer con ellos?