CAPÍTULO 4

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        La noche anterior mi equipo y yo sacamos a todos los internos del psiquiátrico para que fueran con sus familiares, a otros los llevamos con profesionales de verdad ya que si lo necesitaban, mi equipo y yo fuimos a una de las agencias que tenemos en este país, (USA), la mansion, por asi decirlo, cuenta con un Gym, piscina tanto alterna como interna, asi que si alguien se quiere bañar en esta, no tiene que salir afuera y preocuparse del frio.

       En este momento me encuentro haciendo ejercicios en el Gym, por fin podre recuperar tiempo perdido, por fin hago ejercicios de verdad y no tengo que hacer solo lagartijas en una habitación diminuta.

      -A-alex- una voz dulce y cálida interrumpió mis entrenamientos físicos, mire de donde venia y la vi, tan hermosa como siempre, tan natural, tan frágil... tan ella.

      -¿Que pasa, pequeña?- dije acercándome a ella, una vez estuve a su lado, con mi mano derecha acaricie su mejilla izquierda, ella cerro los ojos ante mi tacto.

     -Alex, quiero ir con mi hermano- esas palabras no me gustaron, no la quiero dejar ir, quiero que se quede.

       -Rosalie, te quiero proponer algo- ella no se ira de mi lado, la necesito como el aire para respirar.

       -Acabas de atrapar mi atención, te escucho- dijo con curiosidad, sabia que no se resistiría.

      -Veras a tu hermano- ella sonrio, su felicidad lo es todo para mi, antes de que ella hablara lo hice yo- pero... solo si vienes conmigo a Rusia.

     -No me puedo ir sin el permiso de mis padres- dijo algo decepcionada, pero yo no soy un hombre que se de por vencido tan fácilmente.

      -Eso ya esta arreglado, ya tengo tu pasaporte, y todos los demás documentos, vas a estudiar alla, vas a vivir y...- no se si sea buena idea lo que dire- ...pertenecerás a una de las agencias mas importantes de todo el mundo.

     -¿Que pasa con mi hermano?- dijo insegura, esto le afectara, pero es por su bien.... también porque soy muy egoísta como para tenerla lejos de mi- Alex, yo no quiero estar lejos de Jake.

     -No te alejaras de tu hermano, sabras todos y cada uno de sus movimientos- sus ojos se cristalizaron, no me gusto para nada eso- Rosalie, solo te quiero mantener a salvo- y a mi lado- no quiero que nadie te haga daño otra vez.

      -Lo se, pero quiero ver a mi hermano, abrazarlo... solo quiero cinco minutos con el, es todo lo que pido- me da ternura su hermosa cara aniñada, no le puedo decir que no, pero tampoco puedo dejar que la vean o todo lo que planeo para ella, para mi... para los dos juntos se iria al demonio y no quiero eso.

      -¿Te conformas con verlo desde lejos?

     - Alex, por favor...

     -No me puedo arriesgar a que te vean y te hagan daño- dije acariciando su rostro, su piel es tan suave y delicada que querían permanecer tocándola todo el tiempo- quiero que te mantengas a salvo.

     -Pero mi hermano, el tiene que saber que estoy bien y que estoy en Rusia- me dijo con la voz entre cortada, en serio no le quiero negar esto, pero no la quiero alejar de mi.

     -Mira, acéptalo como te digo, lo vas a ver desde lejos, pero el no te vera a ti- se que ella es muy unida a su hermana, pero ahora la quiero y la necesito  a mi lado- ya se que lo quieres abrazar- dije antes de que replicara- y te prometo que lo haras, pero por el momento tienes que mantenerte a salvo.... tengo un equipo en la organización, mi hermano tiene uno y ellos ya están completos, ahora solo me falta un integrante y esa integrante eres tu.

POR CULPA DEL DESTINODonde viven las historias. Descúbrelo ahora