Diot reía en llanto, una persona que apenas había conocido hace un día estaba preocupado por el, puede sonar raro pero había una conexión desde el principio.
-Necesitamos entrenar- dijo Diot mientras caminaba un poco dando vueltas.
-Esos monstruos eran Jagars, son débiles, por eso los hombres pueden pasar de ellos o matarlos, quizás por eso han comenzado a comerse a su gente, he leído acerca de ellos pero nunca había visto uno- decía Dimitri
-No son débiles si te descuidas aunque si son bastante estúpidos, bueno, hay un pueblo cercano ¿O no?-
-Si, a unos cuantos metros, quizás encontremos un curandero-
-¡Pues Andando!-
Diot corrió con Dimitri por atrás, aunque no sabía a donde se dirigía, Dimitri lo iba guiando y lo regañaba cuando se equivocaba, pero a pesar de dar tantos desvíos al final pudieron ver a lo lejos el pueblo que estaban buscando, apresuraron el paso y llegaron bastante rápido, pero solo para darse cuenta de que no había nadie.
Empezaron por recorrer lentamente y esperar ver a alguien, el pueblo estaba destrozado, no había más que olor a chamuscado y algunas flechas enterradas por el suelo.
-Quizás, no hay nadie- dijo Dimitri
-Gracias, aunque ya lo había notado-
-Es extraño-
-Prueba con tu magia, ¿no hay alguna habilidad para detectar vida?-
-Si, supongo que bastará con un ave desde lo alto-
Dimitri invocó a su ave verde y la hizo volar para observar desde arriba, enseguida caminó junto a Diot recorriendo ruinas.
-No lo sé, algo me resulta extraño, no tiene sentido que el pueblo se encuentre destruido- dijo Diot
Pronto algo aun mas raro sucedió, el ave de Dimitri intentaba avanzar por el aire pero parecía chocar con alguna barrera invisible.
-Creo que se lo que esta pasando, no estamos en el pueblo dijo Dimitri.
Diot iba a hablar pero antes de que saliera una palabra de su boca fue interrumpido.
-En efecto, vaya que eres listo, creí que les tomaría más de un día en enterarse-
En un segundo los alrededores se difuminaron y entonces Diot y Dimitri se encontraban en un agujero, desde lo alto se asomaba la figura de un muchacho delgado con el cabello largo que cubría sus ojos, este los saludaba en señal de burla.
-¿Te crees gracioso?- dijo Diot
-Necesito proteger el pueblo, no puedo dejarlos pasar- contestó el jovencito
Diot comenzó a susurrar algo al oído de Dimitri, enseguida el ave se transformó en una rata que entró por la ropa del joven, este comenzó a retorcerse intentando sacarla, desesperado por hacerlo no vio donde pisaba y resbaló cayendo al agujero en brazos de Diot. Entonces pudieron verlo de cerca, tenía rasgos finos, casi parecía ser una mujer, ojos azules, cabello largo de color marrón oscuro, vestía ropas de cuero y unos guantes negros bastante gastados.
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Guerra, Sangre Y Fantasía
FantasyDespués de la muerte de su padre adoptivo, Diot un joven de 15 años abandonará su hogar en busca de aventuras a lo largo de una edad media mágica, conocerá a mucha gente y vivirá un sinfín de situaciones en compañía. Sin embargo, las mágicas tierras...