Me enamoré de un hombre, siendo una niña

Nunca terminará

       Muchas veces creí que allí se terminaba nuestra historia, pero esto es una historia de "amor" interminable. El mundo, la vida, las personas, todos, conspiran para que nunca termine o tal vez nuestros mismos corazones, no lo sé. Por más que quiera no me puedo olvidar de él fácilmente, ni él tampoco de mí.

         Por más que quería e intentaba dejarle de hablar, era imposible. Somos como dos polos opuestos que siempre se unen. Poco a poco fui hablandole más, pero con algo de temor. No quería que pasara lo de la otra vez y si enrealidad quería verlo tenía que estar segura de que ese dolor ya no me atormentaba.

         La realidad es que nunca llegó ese día, en que me dejase de atormentar, no tenía las mismas fuerzas de antes para decirle "te quiero ver" Es que siempre pienso que una vez más que pase lo mismo y esto termina y no, no quiero que se termine nunca.

       Así esté el mundo contra mí jamás me olvidaré de él. Lo amo tanto que aunque sé que es imperfecto lo veo como el hombre más perfecto.

         Tal vez "no tenga edad suficiente para amar" pero para amar no hay edades y no hablo de amor si no lo siento. Él es lo que nunca soñé que tendría. Es que sentir su voz, mirar su rostro, hablar con él, eran las cosas más perfectas.

         Siempre tuve impedimentos para verlo y para todo y eso me llevó a analizar más las situaciones. Varios factores y lo que la gente decía me llevaron a pensar lo que nunca pensé y que sabía que estaba ocurriendo.

         No quiero dejarlo, él es mío y me encanta pero sinceramente esto no iba a funcionar nunca. Estabamos atados a algo que por ahora no iba a poder suceder. Por mí, por él, por los dos... Estabamos perdiendo nuestra falta de interés por ambos. Ya no era la misma emoción al hablarnos. Se estaba combirtiendo todo en una rutina de hablar por hablar y a veces ni eso.

         A pesar de todo sé que no lo he podido olvidar porque al sentarme sola a pensar lo único que me viene a la mente es él, su nombre, su rostro, sus palabras, todo... y cómo sería estar con él en estos momentos, pero a pesar de todo eso decidí decir adiós.

          Decidí que esto no llegaría a ningún lado, decidí rendirme ante la idea de estar juntos. Es que realmente todavía no logro ubicar lo que siente por mí, todavía no lo veo actuar como si me amara y eso me debilita las ganas de luchar. Me está matando lentamente este amor que siento por él y que yo tampoco quiero explotar. No sé si por temor o por egoísmo, perola verdad es que lo amo con toda mis fuerzas.

          A él que me ha enseñado tantas cosas. Que ha sido mi gran maestro de la vida. Con quién reí y aprendí lo que es la vida. A él, mi mayor inspiración de mis poesías. Gracias a él aprendí como vivir, reír, llorar, sufrir y sobre todo amar.

         Ciertamente no es malo enamorarse de un hombre cuando eres una niña, a veces nos enseñan tantas cosas que nos ayudan a vivir y a madurar. Te ayudan a crecer, son nuestros maestros... y si te encuentras a uno como él, definitivamente es la mejor experiencia que puedas vivir, amarás con tu vida y con tu corazón, cada día creciendo más y rompiendo los esquemas de lo que debe ser una pareja normal. El amor no está en la edad, el amor está en nuestros corazones.