¿No quieres ser uno conmigo? [Kaneki Ken x Sasaki Haise] (R+18)

Parte 6: ¿Que Haces Aquí?

-¡¿Kaneki?!-
-¡¿Haise?!-
Ambos se miraron confundidos, ¿Como fué que Kaneki había adquirido un cuerpo propio?
-P-pero, ¿Que haces aquí?- Haise tocó la cara de Kaneki con su dedo -¿E- eres real?-
-Em e-eso parece-
-Pero, ¿Como? ¿Por qué?-
-Maman, ¿Que pasa?- Preguntó Saiko detras de la puerta, ya que se había asustado al escuchar el grito de Haise. -¿Estás bien?-
-S-Saiko, ¿Y ahora que hago? Ahh, tu guarda silencio- Dijo Haise a Kaneki en voz baja para que la chica no lo escuchara. -Si todo bién Saiko, solo que me he caido-
-Oh, ¿Quieres que entre a ayudarte?-
-No ,no ,no Saiko, e-estoy bien-
-¿Seguro? Te oigo muy extraño-
-Si, ya bajo a hacer el desayuno dame un minúto-
-Vale, está bién-
Haise suspiró aliviado al escuchar los pasos de la chica alejarse.
-¿Y ahora que hago? No puedo esconderte en ningún lado-
-No creo que haya la necesidad- Kaneki se dirigió a la puerta decidio a ir a desayunar con los demás.
-No no no no no, ni lo pienses- Dijo Haise mientras intentaba detener a Kaneki.
-¿Por qué tengo que esconderme?-
-Porque eres un ghoul-
-¿Y eso que?-
-Pues que nosotros nos dedicamos a exterminar ghouls, Kaneki-
-Oh, es cierto, lo había olvidado-
-Amm, quedate aquí y yo bajaré a atender a los demás- Haise se cambió y bajó a hacer el desayuno.
Durante el desayuno, Haise pidió a Shirazu, Urie, Tooru y Saiko, que le avisaran a Akira que llegaría tarde, a lo cuál los cuatro accedieron.
Ya que terminó el desayuno, los chicos se fueron y Haise subió a su habitación.
-¿Y que desayunaré yo?- Kaneki estaba hambriento, pero, para la mala suerte de Haise, no podía darle nada más que café, pero ya no le daba tiempo a prepararlo.
-Sabes preparar café a máquina, ¿No es así?-
-Si, así es-
-Bueno, el café en grano está en la alacena, preparate un café-
-¿Y no hay carne para mi?-
-Claro que no, no asesino personas-
Kaneki hizo un gesto de inconformidad ante la situación.
-No hagas caras, Kaneki, el café es todo lo que puedo ofrecerte; es lógico que no saldré a matar personas y mucho menos tú-
-Pues ya que- Dijo Kaneki con un tono muy claro de fastidio.
-Además, no puedes salir de mi habitación a menos que no haya nadie o que tengas hambre, también procura no hacer tiradero-
-Vale ya-
-Ah, si, y ponte algo menos llamativo-
-¿Como qué?-
-Hay ropa en mi armario, elige algo- Haise se acerco a Kaneki y le dió un tierno beso para despedirse -Te veo mas tarde, Kaneki-
-Si- Kaneki estaba algo sorprendido por lo que Haise acababa de hacer, pero estaba claro que no le molestaba -Espera, ¿A que hora volverán?-
-Aproximadamente a las 8 en punto- Luego de decir esto, Haise se fué.
-Bueno, bajaré a hacer mi "desayuno" si así se le puede llamar-
Kaneki bajó e hizo su café. Después de beberlo, fué a ponerse algo de ropa menos llamativa, acatando la orden de Haise.
Después de esto, Keneki bajó a ver televisión, claro, cuidando de no hacer tiradero.

Por varios momentos del día, Kaneki pensó en desobedecer a Haise e ir de caza para conseguir comida, pero sabía que, además de que podría ser problemático para su pareja, podría terminar con su vida en manos de los otros investigadores.
Trás horas de aburrimiento para Kaneki, se dió cuenta de que la hora marcaba 7:45.
-Supongo que es hora de regresar a la habitación- Kaneki subió las escaleras mientras miraba la casa -No negaré que es bonita y amplia, pero, ¿Acaso es todo lo que pudieron conseguir?- Kaneki suspiró en señal de decepción.
Ya en la habitación de Haise, solo se acostó en la cama y se limitó a mirar el techo.
Finalmente, se escuchó la puerta abrirse, Kaneki pensó en ir a recibir a Haise, pero recordó que también estaban sus subordinados, por lo que por el resto de la cena se quedó con las ganas.
Al finalizar la cena, Haise preparó un café para Kaneki; éra lo mínimo que podría hacer para agradecer la espera del día. Haise subió a su habitación para darle el café a Kaneki.
-Toma, y grácias por esperarme hoy- Dijo Haise dandole la taza a Kaneki.
-Si, no es nada- Kaneki se sentó sobre la cama, recibió la taza y esperó a que el liquido se enfriara un poco.
-Oye Haise-
-Dime-
-Esta casa, ¿Es lo mejor que pudieron conseguir?-
-¿Eh? ¿Por qué lo dices, le haz encontrado alguna falla?-
-Pues no, pero por alguna razón siento que no me es suficiente- Dijo Kaneki ya tomandose el café.
-Hmm, pues no se en que tipo de casa viviste los últimos 20 años de tu vida que fué mejor que esto-
Kaneki se quedó en silencio al recordar el viejo apartamento en el que vivía antes.
-Me imagino que no fué lo mejor del mundo- Pensó Haise al ver que Kaneki no dijo nada.
-Ya me lo he terminado, Haise-
-Deja la taza en la mesa junto a la cama, ya mañana la lavaré-
-Bueno- Kaneki colocó delicadamente la taza en la mesa.
Haise se cambió para ir a dormir, apago las luces y se acostó al lado de Kaneki.
-Siento que la cama sea tan pequeña-
-No te preocupes, no tengo problema-
Pasaron unos minutos pero ninguno de los dos podía dormir. Kaneki decidió que el dormir de espaldas con Haise no le gustaba, así que decidió abrazarle por detrás.
-¿E-eh? ¿Qué... Qué pasa Kaneki?- Haise estaba claramente nervioso ante la acción de su pareja.
-Nada, solo que no me apetece dormir de espaldas con mi novio-
-¿N-novio?-
-Pues claro, fuiste tú el que dijo que quería salir conmigo; ¿O que prefieres? ¿Que te llame mi "novia"?-
-N-no, supongo que no-novio está bien-
Ambos sintieron mas ánimos de dormir así que cuando estaban de espaldas.
Al cabo de unos 15 minútos, ambos se quedaron dormidos bajo la luz de la luna.
-Continuará...
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Amé lo que escribí para ésta parte. En especial el final! A mi me pareció hermoso <3.
Nos vemos en el próximo: Parte 7: Celos