Astrolabios

Afelio.

Ven, acércate a mí.
¿Que no sientes el frío del espacio sobre tu cuerpo? Ven.
Sé que has estado vagando lejos, pero no te has salido de mi órbita todavía y no me das razones. ¡Ven!

Vuelve a mirar mis ojos.
¿Que no te has percatado de lo oscuro que se ha puesto tu rostro? Ven.
Me tienes con la cabeza dando vueltas, y me das vuelta, te acercas y de vuelta te alejas. Ven...

¿Que ya de tan lejos no escuchas mi voz? A veces me olvido que en el espacio no hay ruido. Ven.
Sé que de nuevo te acercarás a mi, sólo por un momento, y que de nuevo te irás, satélite de mi soledad perpetua. Ven...

Juegas a orbitar mi cuerpo celestial y no te das cuenta de la gravedad del asunto cuando te vuelves a alejar.
¿Ya vienes?