Una navidad diferente - Dramione

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Tal y como le había pedido Draco, a las 8:55 Hermione ya estaba vestida, arreglada y despejada para bajar a desayunar.

Como ya no tenía nada que hacer en su habitación decidió bajar a esperarle en la mesa, que seguramente ya tendría todo servido, listo para que ambos desayunasen.

Lo que más le sorpendió fue no encontrarlo allí, tampoco había oído sonido alguno proveniente de su habitación. Por momentos se había planteado que su ahora amigo hubiese lanzado un hechizo silenciador sobre su propia estancia, pero al lanzar un hechizo ella misma para comprobarlo pudo darse cuenta de que se equivocaba.

Una de dos, o estaba dormido, o era una persona muy pero que muy silenciosa.

Sonaron las 9:00 en punto, y todavía no estaba con ella.

- Tendrá morro, me recalcó una y otra vez que fuese puntual y va y es él quien no aparece. Caradura. - dijo en voz alta.

- Querida Hermione, he salido a comprar el periódico ya que realmente no pensaba que fueses ha hacer caso a el horario que te había requerido.

Se sobresaltó de tal manera, que uno de los vasos con batido de frutas salió volando y terminó contra el suelo.

- Genial, ahora tendré que llamar al servicio. - dijo Draco - Por cierto, te he traido esto, no es nada, solo un detalle por todo eso que has tenido que pasar.

El le tendió una flor, era una orquidia morada preciosa que ella aceptó encantada.

- Gracias, y perdón por el vaso roto, no hace falta que llames a nadie, ya lo limpió yo.

- Si insistes.

- Teniendo en cuenta que durante el desayuno me vas a estar preguntando por todo lo que te expliqué, es mejor que no haya nadie más por aquí.

- En eso tienes razón, mientras limpias, yo mismo prepararé un nuevo batido. - dijo al tiempo que se dirigía hacia la cocina.

- Aquí te espero.

Ya con todo solucionado, se sentaron a desayunar.

- Bueno, así que... Desmemorizaste a tus padres.

- Si.

- La verdad, no entiendo como pudiste hacerlo. Probablemente yo no hubiese sido capaz de desmerorizar a los míos aún sabiendo que esteviesen en peligro de muerte.

- No fue fácil, estuve como 2 meses planteándomelo, justo cuando comenzaron los ataques más insignificantes, en tiendas, festivales... Cuandó supe que se acercaba la guerra definitiva, no lo dudé ni un instante.

- Ya, bueno. Es de entender. Yo en esos momentos hubiese hecho lo posible por que mi padre muriera, el nos arrastró a mi madre y a mi a esa vida de mierda. Y ahora los dos están muertos. Mi padre murió el mismo día en que Voldemort fue vencido por Harry, cuándo se presentaron los aurores. No logró huir. Mi madre y yo, estuvimos escondidos durante un año, pero nos encontraron. A ella la condenaron, no ha muerte, pero a realizar trabajos benéficos durante 10 años, a mi me dejaron libre porque era un crío, conseguí montar mis empresas y triunfar. Dos años más tarde me llegó una carta diciendo que mi madre había muerto por una enfermedad, yo creo que se libraron de ella, alguien que buscaba venganza.

- Lo siento mucho.

- No te disculpes, supongo que es mejor tener unos padres que estén muertos, a tenerlos vivos en algún lugar pero sin que te recuerden.

- ¿Podemos cambiar de tema por favor? - respondió Hermione con la voz quebrada.

- Si, tenía otra pregunta, ¿A qué te referías con lo de qué en muchos trabajos habían intentado sobrepasarse contigo?

- A pues, a veces tenía que trabajar más horas de las que me decían y si me negaba a hacerlo porque no me las pagaban, me golpeaban.

- ¿Eso es todo? Creo que hay algo más que no me estás contando.

Ella cogió aire.

- En uno de los trabajos en los que cobraba bien.... Mi jefe... Bueno, él... Intento viol... violarme.

El rostro de Draco se tensó, y se quedó pálido. Sin creérselo.

- ¿Quién era ese jefe? - preguntó muy cabreado.

- No creo que quieras saberlo...

- Dimelo, haré lo que esté en mi mano para que el mundo sepa de ese sinvergüenza.

- Se llamaba Crabbe.

- ¿Crabbe? ¿Mi amigo del colegio?

- Si...

- ¿No le denunciaste? - quiso saber.

- Me amenazó con encontrar a mis padres y matarlos, y creí su palabra. Es un gran empresario, tanto como tú. Con sus contactos no habría tardado en encontrarlos.

- Fantástico.

Draco se pusó en pie, se acercó a Hermione, puso sus manos en los costados de la silla en la que ella estaba sentada y le plantó un beso en la mejilla.

- Espero que nunca más tengas que pasar por algo así. - dijo saliendo de la sala.

Ella se quedó allí sin saber muy bien que hacer, comprobó la hora, las 11:00, era su turno en la biblioteca.

Se hizo aparecer allí, preguntándose a cada instante que estaría haciendo Draco con la información que le había dado.

No encontraba inspiración pero bueno, ahora espero que lo disfrutéis. ❤🐘