Don't follow me.

Adiós.

Hace 11 meses atrás...

Era fin de año cuando lo conocí, al parecer para mi, un chico de 19 años, no era relevante el conocer al futuro esposo de mi hermana, era tan fastidioso ver como toda la atención iba a estar en Jiwoo y no poder disfrutar de una buena cena hecha por mi madre.

--¡Hoseok llaman en la puerta! ¡Abre!--ahí esta, la dulzura de mi madre, un poco molesta porque no he bajado desde las 9:30 am para ayudar en los preparativos de la cena.

--¡Ya voy!-- Uff.

Terminaba de vestirme con la ropa que Jiwoo me había comprado un día antes, sin mi consentimiento, claro después de la larga ducha que me di, cabello castaño hacía atrás, anteojos levemente inclinados en el puente de mi nariz, pantalones oscuros pegados y una camisa blanca por dentro. Al parecer Jiwoo no entendía que era una simple cena y no un club de strip.

Cuando bajé para poder abrir la puerta la voz irritante de mi hermana me detuvo.

-Por favor se educado, Hoseok su familia es seria y así fue criado el, no necesito shows en casa, solo te pido esta noche- La miraba con en ceño fruncido pero asentí a su petición ¿Qué tan malo podría ser? No creo que tanto. Estaba tan equivocado.

Abrí la puerta y jamás creí haber visto un rostro tan masculino y delineado, ojos profundos y oscuros.

--Hola. Soy Namjoon, tu debes ser el hermano de Jiwoo-- Oh si, claro que era su hermano.

--Hola, adelante-- Con mi cara de idiota me hice a un lado para que pudiera pasar, pero ¿quien es el qué venia tras de el?

--Con permiso. Soy Yoongi hermano de Namjoon-- Dijo el chico con cabello obscuro y piel pálida.

--Adelante-- ¿Acaso hoy es el día en el que conoceré puros chicos atractivos? ¿Por qué justamente ahora tenia que controlar mis hormonas?

El enorme grito de mi hermana me saco de mis pensamientos.

--¡Namjoon!-- esa era Jiwoo, siempre tan feliz y amorosa.

--Hola bebé, ¿Cómo estas?
traje conmigo a mi hermano, espero no te moleste, mis padres me lo han encargado y no quería faltar a esto tan especial para ti-- el atractivo chico llamado al parecer "Namjoon" y  (supongo yo), el prometido de mi hermana le había contado el porqué del chico pálido.

--No importa, mi hermanito puede pasar tiempo con el ¿te parece?--

Inmediatamente interrumpi. 

--Oh no, yo estoy esperando a Jungkook, en cuanto llegue me iré a mi habitación junto con el, es su ultimo día antes de ir al internado en China, aprovecharé a mi novio-- Soy Hoseok, no me da miedo ni pena decir que soy homosexual y mucho menos cuando el amor de mi vida se ira a un jodido internado por un año entero.

--Hoseok creo que Yoongi no molestara ni fastidiara tu momento con Jungkook, ¡dale una oportunidad!-- Les juro que le diría que si, pero tener a mi novio y a un chico atractivo en mi habitación no suena muy bien, en serio, si de celos se trata Jungkook gana un premio.

Antes de poder responder a mi hermana un bufido salio de la boca de Yoongi y hablo.

--Me da igual con quien deba de estar, si me necesitan solo estaré en la sala esperando a que esto se acabe ¿bien?--

Uff, este chico tiene un carácter horrible, bueno, yo no soy el mejor para decir eso, pero en serio el parece que será peor que yo.

En medio del silencio que provoco la seca respuesta de Yoongi se escucho el timbre--Genial-- Es Jungkook, lo sabia y el se dará cuenta de este ambiente, lo que menos deseaba en estos momentos. Corrí para abrir y me encontré a mi hermoso novio con traje y un ramo de flores, que felicidad.

--Hola amor-- Sonreí tal colegiala enamorada recibiendo un beso de por medio.
--Hola guapo, ¿puedo pasar?-- Con su típica sonrisa burlona y después de que me entregara el ramo le di paso libre con dirección a las escaleras.

Cerré la puerta tras de mi y observe la situación. Mi hermana y su prometido sentados en el comedor platicando con mi madre, Jungkook entrando y saludando a todos y después Yoongi, juntando miradas conmigo y negándose ha apartar la vista. Cautivador ¿no? Pues mi novio no lo vio así, me di cuenta cuando sentí como jalaba de mi hacía mi arriba obligándome a dejar de retener la mirada con Yoongi.  

Entro junto conmigo al cuarto y cerro tras de mi la puerta empujandome con un poco de fuerza a ella, así comenzo devorando mis labios, en seguida correspondí colocando mis manos al rededor de su cuello presionando así más el beso necesitado que estábamos experimentando, me sujeto de las caderas y me elevó haciendo que enrollara mis piernas en su cintura. Justo cuando pensé que íbamos por más, se detuvo.  

--¿Qué paso?-- Dije jadeando por la falta de aire y la excitación que me consumía.

--Nada bebé, pero quiero hablar antes de perder cualquier estribo de consciencia que me queda--

--De acuerdo-- Y así me coloco en el suelo despacio y me guio a la cama sentándose justo a un lado de mi.

Me miraba con ojos de cachorro abandonado, como si ambos supiéramos que seguía ahora, no era una despedida, ni siquiera un roptura, pero era triste interponer una distancia tan grande en nuestra relación, dolía.

--Me iré mañana a las 5:00 de la madrugada hacía el aeropuerto-- Y ahí esta, lo soltó.

--Lo se, yo iré contigo al aeropuerto-- Sonaba muy triste y cansado, esta situación lleva meses fastidiando, solo contaba los días sin poder evitarlo.

--No Hobi, sabes que no puedes acompañarme al aeropuerto, mañana tienes los papeles de transferencia de la universidad y no quiero que llegues tarde, si vas al aeropuerto junto conmigo no será una despedida tan rápida--

--Puedo intentarlo-- Sonaba patetico, rogando por minutos de amor, tal vez horas.

-No lo permitire, por eso vine aquí hoy. Pasemos un buen rato hasta volver al reencuentro ¿te parece?--

Me lo decía tan sereno, como si de verdad me garantizara volver por mi y no enamorarse de alguien más.

Vaya, que decepción se va a llevar en unos cuantos meses.
Bajamos justo cuando servían la cena y así continuo la noche, convivimos con la familia, Yoongi no paraba de ponerme los ojos encima y yo fingiendo sonreir cuando sabia que por dentro estaba roto.

La despedida era inevitable.

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Comencemos.