Vida destruida

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Amelia está en su casa, tirada en la cama esperando a Ricardo, viendo la TV y mira su reloj. Se da cuenta que son las 2:30 de la madrugada y el no a llegado. Coje su teléfono y comienza a llamarlo.

Amelia: Contesta mi vida, contesta.( desesperada) ¡Contesta!... (Molesta) Ricardo ya son las 2:37 de la madrugad y no has llegado. ¿Qué esta pasando? Esto no me esta gustando. Si llegas, Duerme con el perro. Bye Te Amo.

Suena el teléfono. Amelia corre y lo contesta.

Amelia: ¿Hola? ¿Quien me habla? Si soy yo Amelia Ortiz, ¿porque me llaman del Hospital? Si soy su novia, ¿Qué a sucedido? (Sorprendida y asustada) ¿cómo puede ser posible? El se supone que halla llegado a darme el beso de las buenas noches. Usted esta equivocada, usted me esta haciendo una broma de muy mal gusto, ¡NO!( angustiada) Señorita, dígame la verdad, dime que no está muerto. ( Sorprendida, se cae el teléfono y comienza a gritar en llantos) ¡NOOOO! (En llantos) (coje una foto de Ricardo) ¿No se supone que ese gran Hombre, el que se levantará todas las mañanas con sus Buenos Días serias tu? El qué estaría a mi lado hasta la Eternidad. ¿Por que? No juegues con mis sentimientos Ricardo. No seas estúpido. No seas así. Tu destino era conmigo, sólo conmigo. Yo Te quiero. Te necesito. No me hagas esto, por favor...

Están en el velorio muchas personas, de repente llega el jefe de Amelia, Marcos.

Marcos: No sabes lo mucho que lo lamento. Mis más sentido pésame. (agacha la cabeza)

Amelia: Muchas gracias Marcos. No sabes el gran gusto de verlo aquí.(transición y comienza a llorar.)

Marcos:(consolando) No te preocupes, el esta en un lugar mejor. Donde tu eres la Reina. Allá en los más grandes y lejanos cielos. Todo estará bien.

Amelia: (sonríe y lo mira) ¡Gracias!

Marcos: No hay nada que agradecer, yo estaré para ti en todo momento, en cualquier lugar. No te preocupes.

Amelia: De nuevo Gracias.
(Los dos miran fijamente a la tumba)

Han pasado 3 años desde el velorio. Amelia se había mudado a otro lugar y Marcos no tenía comunicación con ella. Un día caminando se encuentran.

Marcos: ¿Amelia? Amelia eres tu...

Amelia: (sorprendida) ¿Marcos? Woo a pasado 3 años desde la última vez que hablamos.

Marcos: Si tienes razón,(se rasca la cabeza) ¿Y los perros hambrientos?

Amelia: (confundida) ¿Perros hambrientos?

Marcos: (confuso) si, los pretendientes, debes tener muchos, o Me equivoco.

Amelia: Ahh los pretendientes (sonriendo) No, no tengo ninguno.

Marcos: Ya tienes el primero.

Amelia: ¿Enserio? ¿Cuál? ( mira a su al rededor)

Marcos: (sonriendo) está al frente tuyo.

Amelia: Ahh (comienza a reírse) usted siempre con sus bromitas pesadas.

Marcos: ¿quieres ir a cenar?

Amelia: (sorprendida) Claro, ¿cuando?

Marcos: ¿ esta noche?

Amelia: ¡Si!

Marcos: (nervioso) ok, a las 8:30 en el restaurante de la calle 28, por aquí cerca.

Amelia: (despidiéndose con un beso suave en la mejilla) allí estaré.

Marcos: ( sorprendido tocando se la mejilla, sonriendo y comienza a gritar) Me dijo que sí, me dijo que sí. Yes!

Están sentados en una lujosa mesa para dos. Con velas. Cada uno se mira a los ojos.

Marcos: Te vez hermosa. Mi reina de los más grandes y lejanos cielos.

Amelia: (apenada) Marcos, ¿porque haces esto?

Marcos: Amelia, desde hace 5 años que nos conocemos, cuando trabajaba para mi, siempre e estado enamorado de ti. Y perdóname si te esta malo, pero es lo que siente mi corazón. (Coje su mano y la pone en el pecho) Y quiero gritarlo a los cuatro vientos, pero eso si tu me dejas.

Amelia: ( comienza a reír) Que chistoso eres.

Marcos: (serio) ¿Crees qué es una broma? ¿Crees qué yo no siento esto?

Amelia:(apenada) no, no creo que sea una broma, puedes sentir muchas cosas, pero no creo que yo sea la perfecta o indicada.

Marcos: Pero...

Amelia(se levanta de la silla) Pero nada, gracias por todo. (Se marcha)

Marcos:(sorprendido y comienza a llorar) Otra vez no, porque otra vez. Nunca debí. No soy digno para ella.

Una NocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora