Cap15

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En el penúltimo número, me arrepentí y colgué el teléfono bruscamente, no iba a hacerlo, no iba a llamarlo. Volví al lugar donde estaba sentada junto a Joseph.

—¿Y bien? —dije como si nada.

— _____, ¿Estás enamorada de Chandler? —trague saliva ante su pregunta.

—Yo, no lo sé...

—¿No lo sabes?

—No —murmuré. —No lo sé, pero debe haber alguna explicación para lo que siento hacía él, ¿no?

—_____, mírate! Estas sufriendo por él, ésta no es la _____ Stone que yo conocí al entrar.

—Joseph, yo lo sé... Pero, las últimas palabras que él dijo, me hirieron tanto.

—Eso lo sé, sé que las palabras duelen más que los mismos golpes, pero por eso no te vas a dejar caer... ¿Cierto?

—Lo sé —suspire. —Él me declaró su amor, la semana antepasada. Yo... yo no supe que decirle y salí huyendo de ahí.

Mis ojos se cristalizaron y segundos después solté lágrimas, Joseph me abrazó y dejé que lo hiciera, en realidad se estaba portando muy bien conmigo.

—Tranquila _____, todo estará bien.

—¡Claro que no! Siempre me dicen lo mismo, y nada cambia. Nunca debí haberme involucrado en esto, nunca debí aceptar acostarme con Chandler, nunca debí... —suspire.

Enamorarme.

—¿Enamorarte? —¡¿Es que Joseph leía mi mente?!

—Algo... Algo así.

— _____, sólo hay una única explicación para que estés devastada. El sentimiento de culpa, por más fuerte que sea, no te pone así... En cambio, un corazón roto si... Quizás...

—Si —murmuré. —Quizás si esté enamorada de él.

—Es lo mas seguro... ¿Y por qué no se lo dices?

—Joseph, tu has visto como me trato el lunes pasado... No podría decirle.

—Pensándolo bien... _____, ¡Heriste su orgullo!

—¿Qué? —pregunte confundida.

—¡Sí! ¿¡Cómo no lo pensé antes!? Heriste su orgullo _____, el gran Chandler Riggs te declaró su amor, según he escuchado, él nunca había estado enamorado, hasta que te conoció. Ahora que por fin se ha enamorado y que su gran "amada" lo ha rechazado, fue como quitarle su orgullo —me quedé pensando unos instantes. ¡Claro! Al rechazarlo, había roto su orgullo y su... —También su corazón. ¡_____, le rompiste el corazón! —me quede perpetua.

¿Cómo no lo había pensado antes? ¡Por supuesto! Los hombres son muy orgullosos y tratándose de Chandler, lo es más.

—Esa es la razón por la cual se ausento, toda la semana, y al irlo tú a buscar, era obvio que diera indicaciones de decir dónde estaba.

Mi amigo tenía toda la razón.

—¿Y qué hago ahora?

—Nada, mañana _____ Stone regresará, normal como si nada hubiese pasado, él regreso con la idea de hacerte sufrir, ¿Qué tal sí el tablero se cambia?

Lunes por la mañana, me levanté justo antes de que el despertador sonará. Sí Chandler quería hacerme sufrir y jugar un jueguito, pues que se prepararé, porque conmigo no iba a jugar.
Tomé una ducha y me vestí.
Dejé mi cabello suelto en ondas, unté un poco de brillo labial en mis labios y ya estaba lista. Además de que me sentía genial pero luego recordé por qué lo hacía. En realidad yo no quería darle su merecido a Chandler, yo quería tenerlo de nuevo para mí, solo para mí, irónico ¿no? Ya que Chandler me dió todo su amor y lo único que hice fue darle un adiós, y ya era muy tarde cuando descubrí todo el amor que sentía por él.

Baje de mi habitación suspirando, mis padres se habían ido temprano como siempre. Miré el reloj de mi celular, iba más temprano que de costumbre y sentía un cosquilleo en mi estomago, lancé un suspiro más y me dispuse a salir de la casa.

——

Narra Chandler.

—Sabes que te quiero temprano, Chandler —dijo mi madre deteniéndome antes de salir. —No quiero que te quedes con esa novia tuya, la rubia esa.

—¿Karen? —pregunte recordándole el nombre de mi ahora novia.

—Si, o cómo sea, sigo insistiendo en que _____ se veía mejor para ser tu novia.

—Mamá, ¿Qué te dije sobre escuchar su nombre en esta casa?

—Lo siento hijo, pero como te dije el otro día, no ganarás nada con tu orgullo y tu "venganza", sólo la harás sufrir.

—Para lo que me importa.

Dicho esto salí de la casa azotando la puerta, no tenía ganas de nada, estaba desganado. Sólo iba para ver su rostro, y apreciar su cuerpo, verla a ella, esperaba con ansias que _____ ahora sí se presentará en la escuela después de una semana. Sé que la había tratado muy mal con mis palabras, pero ni yo mismo sabía que me había pasado, tenía tanto dolor en ese instante, que verla me había terminado partiendo el corazón por completo.

Estacioné mi auto y justo cuando baje, el carro de _____ se estacionó junto al mío, seguro me había visto pero conociéndola de orgullosa y algo rencorosa, bajo sin darme importancia, aunque aún estaba parado algo sorprendido. Activé la alarma de mi auto, y ella hizo lo mismo con su auto.

—Buenos días, gatita —dije sonriéndole, ella levanto su vista a mí y sólo sonrió.

—Buenos días —dijo bajo, luego comenzó a buscar algo en su bolsa, aproveche para rodear el auto y acercarme a ella.

—Se ve que no me extrañas. ¿O me equivoco? —dije en su oído, en seguida se giro con los ojos bien abiertos, quedando frente a mí.

—Siendo sincera, no, no te extraño. —sonrió cínicamente. Parecía que ahora todo volvía a ser como el principio, sus sonrisas cínicas, sus miradas penetrantes. —Y ahora, con permiso. Debo ir a clase.

Trato de esquivarme pero fuí mucho mas rápido, la tomé de la cintura he intente besarla.

Secret Sex [Chandler Riggs y tú] HOT.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora