El dolor tras la máscara del shinobi

Prologo

EL DOLOR TRAS LA MASCARA DEL SHINOBI.

PROLOGO

Aldea de la Hoja.

Han pasado ya cinco años desde el ataque del Zorro de nueve colas y la muerte del cuarto hokage. Poco a poco, las personas se van acostumbrando cada ves mas a la paz, intentando dejar atrás los dolorosos años de guerra y conflicto entre naciones.

Es una tarde como cualquier otra, el cielo iluminado de rojo por el sol a punto de ocultarse adorna el paisaje de la tranquila ciudad, las personas van sonrientes por las calles intentando así ocultar las profundas cicatrices que la guerra les ha dejado.

El viento sopla levemente moviendo el cabello de Kakashi quien inerte se encuentra de pie frente a una tumba justo al centro del cementerio. Nohara Rin es el nombre escrito en aquella lapida perfectamente cuidada y adornada con un hermoso ramo de crisantemos blancos encima.

Con la melancolía del clima reflejada en sus ojos Kakashi la mira mientras piensa en los errores que lo llevaron hasta ese momento. Se encuentra solo y no tiene un motivo claro para vivir, todo lo que le queda es su sentido del deber como shinobi, las personas mas importantes en su vida han muerto trágica mente y se culpa a si mismo por el solo hecho de estar vivo, pasa los días lamentándose por sus malas decisiones en el pasado mientras espera el momento de su muerte.

Entre lo calmo de aquel cementerio, de pronto el acompasado sonido de los pasos de alguien acercándose por detrás interrumpe su reflexión. Es Yugao, la joven kunoichi recién reclutada por ANBU se para a su lado.

— ¿ Qué haces aquí ? — Pregunta Kakashi sin voltear a verla.

— El hokage te llama, sempai.

Por un momento el peliplata se queda ahí parado sin decir nada y con la mirada muerta, segundos después los dos caminan en silencio hacia afuera del cementerio.

...

Lejos de ahí, en algún lugar del país del fuego, un grupo de aproximadamente veinte shinobis corren en formación abriéndose paso a través del muy denso bosque. Llevan vestimentas shinobi con túnicas negras y cubren sus rostros con mascaras blancas en las que resaltan tres cuernos al frente emulando la temible figura de un shinigami.

Cuando la noche aparece y la oscuridad toma el terreno, el shinobi que lidera al grupo se muestra algo ansioso, parece tener prisa por llegar a su destino.
Cautelosos avanzan procurando no ser tomados por sorpresa. Cada tanto detienen sus pasos mientras sus ninjas sensoriales rastrean el area en busca de enemigos.

— Sean cuidadoso... Podríamos encontrarnos con perros de la aldea de la hoja — Dice de forma despectiva el shinobi a cargo.

De figura robusta y con una voz gruesa e intimidante tras su mascara se advierte un hombre mayor que parece envuelto por un aura de oscuridad que envuelve incluso a los subordinados que lo acompañan.

Llegado un punto exacto el grupo se detiene y aquel hombre de temible apariencia da la orden de separarse a un pequeño grupo de sus hombres quienes reciben de el una fotografía, una sonriente joven de cabello negro aparece en ella.

— ¡No pueden fallar — Advierte aquel Shinobi ante la partida de los suyos.

...

Por la noche.

El tercer hokage se encuentra parado al centro de su amplia habitación privada, fuma de su pipa mientras observa las calles de konoha a través de una ventana.

Postrado frente a el con una rodilla al piso esta Kakashi.

— Últimamente a habido algunos disturbios en el país de la tierra — Dice el hokage a un Kakashi que lo escucha atentamente.

— Nuestra unidad de inteligencia los a estado vigilando, gracias a eso hemos descubierto algunas cosas. Al parecer algunos shinobis de aquella nación han estado conspirando en cooperación con el país del bosque...

— ¿País del bosque? — Pregunta Kakashi.

— ¿Se trata del grupo Prajña?

— Así parece — Responde el anciano Hokage soltando el humo por su boca

Prajña, aquel regimiento ANBU del país del bosque ya antes había sido un dolor de cabeza para la aldea de la hoja y Kakashi los conoce muy bien.
Después de haberse enfrentado a ellos un par de veces es plenamente consciente del peligro que significa tenerlos como enemigos.

— Entonces,  ¿Debo averiguar sus planes ? — Pregunta Kakashi.

— Ciertamente esa es parte de tu misión... Aunque deberás ocuparte también de otro asunto.

— ¿De que se trata?

— Deberas cuidar de alguien — Responde el Hokage al tiempo que entrega un pergamino a Kakashi.

— Según la información que tenemos ella corre peligro...

— ¿Ella?

— En ese pergamino encontrarás todo lo relacionado con tu misión.

...

FIN DEL PROLOGO.