Paseo de medianoche

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—Digo que mejor nos larguemos de aquí  —Dijo decidido el baterista a lo que Duff mostró una mueca de agrado.

Dave sacudió su cabeza intentando que esos recuerdos lo dejaran en paz. No quería volver a estar triste.

Pero le fue imposible dejar de recordar al frenarse frente del parque que se encontraba a dos calles de aquél bar.
Las dolorosas memorias volvieron a hacerse presente.

Los dos salieron del bar encontrándose con una noche de verano cálida y agradable, perfecta para salir. Era la noche que Duff quería antes de abandonar Seattle para convertirse en alguien conocido o famoso por así decirlo. 

 —Y bueno señor McKagan, ¿Que desea hacer en su última noche en este pueblito? — Preguntó divertido Dave mientras caminaban a un parque para decidir que podían hacer, ya que tenían toda la noche por delante

 —No lo sé mi querido amigo — Pasó su largo brazo por los hombros de Dave.  Que este de nuevo volvió a experimentar esa corriente extraña que al parecer sólo aparecía cuando el alto lo tocaba

 Ya en el parque el rubio se la pasaba contando anécdotas divertidas de su vida y algunas personales no tan divertidas. Pero eso sólo demostraba lo transparente que era aquél teñido, dándole a entender a Dave que ya tenía su confiaza.

Dave tampoco se quedaba atrás en eso. El baterista le contaba cosas de su vida también para devolverle a Duff esa confianza que acababa de depositar en él.

Igualmente, después de cada anécdota mala de Duff, éste lo remataba con un chiste para no crear un ambiente incómodo. A lo que Dave ante eso, pensó que quizás eso era lo especial en él.

Reían y hablaban como si se conocieran de años. Habían hecho una muy buena química al momento que comenzaron a platicar.

A Duff le encantaba contar la historia de su primera vez tiñiendose. Y hoy no iba a ser la excepción de contarla siempre

 —...y tuve que volverme a teñir las cejas de mi color natural culpa del decolorante que accidentamente cayó ahí — Se reía a carcajadas con sólo recordar verse al espejo con sus cejas rubias también

—Creo que no deberías volver a teñirte tu solo — Decía Dave entre risas. No sabé porqué, pero al menor le gustaba escuchar a Duff reir. Y para su suerte, el rubio era muy risueño

 —Ya no lo hago solo si eso te tranquiliza — Revolvió los cabellos negros del baterista haciendo que este sonriera de una manera boba mientras miraba al alto— Ahora Axl me ayuda a hacerlo.

 —¿Axl? — Dave ladeó su cabeza tan cual un perro al no entender a quién se refería

 —El vocalista de la banda — respondió — Ya sabes, el que usa bandanitas y es mas rojo que un tomate— Sonrió por la descripción que acababa de hacer sobre Axl—Estoy seguro que si lo conocieras te caería muy bien, es un tipo agradable

 —Si tú lo dices, es porque es cierto — El pelinegro miró a Duff  y este le sonrió haciendo que Dave se pusiera nervioso sin razón alguna dejando una sensación rara en su estómago.

Porque no eran nervios de miedo o de inseguridad. Tampoco entendía porque se sentía muy pequeño al lado de Duff, además del hecho de que era increíblemente alto. Se sentía vulnerable, no es como que Duff fuera a hacerle algo malo.
Era algo que nunca le había pasado antes

Pasaron de ser desconocidos en un bar a ser casi como mejores amigos. Y Duff ya dejaba en claro que le tomó cariño a Dave. Ya lo había tachado como su amigo. 

Wintertime Love : Daff \Duff + Dave/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora