Amazonas. Capitulo 3

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Precaución, novela sobrenatural, del género Harem con erotismo de alto voltaje.

Capitulo 3:

Estando preso, atrapado por un grupo de varias mujeres lujuriosas y perversas me quede quieto, sintiéndome un objeto cualquiera, menos que un humano, sino un mero juguete

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Estando preso, atrapado por un grupo de varias mujeres lujuriosas y perversas me quede quieto, sintiéndome un objeto cualquiera, menos que un humano, sino un mero juguete. Senti invadirme de ira, de resentimiento, y de humillación. También me sentí nervioso y asustado, esperando que lo que tuvieran propuesto hacerme aquellas mujeres culminara lo antes posible.

Cerré los ojos tenso, luego trate de no pensar en nada. Separe cuerpo de la mente. Me centre solamente en la imagen de Nahimana. Me aferre a su recuerdo, a su aroma dulce y seductor, a su calor corporal, a su voz, a su mirada, al sabor de sus besos y al sabor embriagante de su piel. Lo mismo a la suavidad de su piel.

Me mantuve deseando que las caricias obscenas y lascivas que estaba recibiendo a pleno día, en medio de un claro en la selva, de parte de varias mujeres, fueran las caricias de parte de mi amada y no provenientes de mujeres que nada significaban para mi.

Yo amaba y deseaba locamente a Nahimana, a nadie mas. No deseaba ni por asomo tocar, besar y hacerle el amor a ninguna mujer a parte de ella, pero no tenia otra opción que convertirme en un esclavo sexual para el clan de las mujeres pantera de esta zona geográfica, porque era el único modo de volver a los brazos de mi verdadera y única mujer.

Estas amazonas, todas a la vez, me acariciaban y jugaban a excitar mi cuerpo. Se alejaba de mi boca siendo degustada, una mujer y venia otra a ocupar su lugar.

Aquellas mujeres con destreza, lujuria y deseo fueron abriendo los botones de mi camisa blanca, puesta debajo de un chaleco sin mangas, chaleco de explorador, sentí luego en la piel de mi pecho, estómago y vientre besos y lamidas. También sentí uñas largas marcando mi piel. Sumaron chupetones y mordiscos en la exploración de mi piel, entonces comprendí que me marcarían como su semental por medio de marcas visibles en el cuerpo. Nahimana en cambio me marco como suyo por medio de pasión y entrega incendiaria, jamás con marcas que me lastimaran.

A manos de las hermanas de Nahimana, me sentí sumamente nervioso, asustado y abusado cuando abrieron la bragueta de mi pantalón ajustado de explorador, me liberaron la erección que apareció aún en contra de mi voluntad. Deseaba que no me dejaran totalmente desnudo. No quería que me sacaran toda la ropa, ni las botas de montar, que son largas y de cuero negro. No deseaba sentirme mas frágil, y expuesto, aunque mas expuesto no podía estar al ser presa de caricias, de besos y demás en contra de mi voluntad. Nada es mas humillante y vergonzoso para uno mismo como persona, ya sea hombre o mujer que estar obligado saciar sexualmente a la fuerza a otra persona. Alguien a quién no amas y no deseas.

Ninguna parte de mi cuerpo estaba libre de unas manos y de bocas hambrientas. Me dejaron cubierto de saliva el torso delantero, lo mismo al miembro viril, así que a mi pesar mi falo se mantuvo duro.

Fui liberado de la ropa superior del cuerpo y bajaron hasta las rodillas el pantalón y la ropa interior. No se molestaron en sacarme las botas. Ojala y no lo hicieran.

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