-Que mentirosa eres - volteó a verme - y demasiado hermosa
Vario rato después Tom se paró porque quería taparme los ojos, aunque es obvio que confío plenamente en él.
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-Tom ¿ya?
Conforme ibamos caminando, sentía una brisa muy agradable, el sonido de los grillos en la noche, y olor a flores, pasto, plantas. Ya estaba empezando a agradarme.
-¿Te gusta?
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-Es hermoso - chillé de la emoción - oh tom - lo abrazé
-No tienes nada que agradecer nena - me besa - ¿quieres ir a ver la cabaña?
-Claro
Nos dirigimos hacia adentro, y no puedo creerlo, estoy viviendo algo irreal, todo lo que me está pasando ahora es perfecto.
-Wow ¿es tuya?
-Sí, la compré hace un año, quería despejarme de la ciudad y conseguí un contacto y pues me dijo sobre la cabaña y la compré
-¿Vienes seguido?
-No, está limpia porque contrato a alguien para que la esté arreglando, es decir, el polvo y todo este tipo de cosas - se sienta en el sofá - ven conmigo
Y con gusto acepté
-¿Qué quieres hacer? - dice coqueto
-No sé....tú dime - le seguí el juego
Entonces él me tomó de mis mejillas y me besó, fué un beso lento y lindo, no fué como los otros...salvajes y descontrolados....que triste.
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-Iughhhh - me tapé la boca en señal de asco
-¿Qué pasa? - gritó Tom riéndose desde la sala
-¡Según tú viene alguien a limpiar y hay un maldito mapache en la estufaa! - grité
-¡¿Qué?! - dice mientras se dirigía hacia la cocina
-¡Miraa! - dije mientras tomaba el mapache con un guante - ay dios, qué asqueroso es ésto.....¿qué? ¿de qué te ríes? Tú deberías de sacar ésto.... - abrí la puerta que estaba en la cocina y lo lanzé lo suficientemente lejos
-Creo que yo siempre sería feliz a tu lado - oí decir a Tom - es que mírate...siempre me haces sonreír