Hyung Te Quiero 🎈

• Dolor •

Hoy era sábado día de descanso y libre de tareas , estaba en mi cuarto escuchando un poco de musica disfrutando de mi soledad ya que mi madre salio al súper por algo de comida , me iba quedando dormido pero algo me hizo levantarme de repente rápidamente un estruendo en mi ventana , la habían quebrado y había en una piedra tirada en el piso una nota "Sal cobarde" eso me hizo mirar por la ventana y nada mas y nada menos que ahí estaba el tal Park Jimin yo solo lo salude burlonamente y el hacia gestos con sus manos tal vez me insultaba haciendo un escandalo yo quería callarlo así que baje a hacerlo.

-Mira Jimin quieres callarte y agradece que no te hago pagar la ven... -un fuerte golpe impacto mi cara haciendo que mi boca se llenara de sangre y por instinto le devolví los golpes.

Un rato estuvimos peleando y nadie se atrevía a separarnos solo hasta que yo caí en el piso tratando de seguir luchando pero mi cuerpo no dio para mas e impacte en el solido suelo esperando que alguien me ayudaba estaba ahí ... A la deriva mientras veía que el tonto de Jimin se iba como podía yo quede tendido en el suelo. Que alguien me ayude ... Mire hacia el cielo. Era hermoso : una mezcla de índigo , naranja y plateado. Un sol pálido emergió detrás de una oscura nube de lluvia. No quería moverme , solo permanecer tranquilo y disfrutar de ese cielo. Comencé a sentirme aturdido.

-Concéntrate Kook -me dije- . Quedare aquí , no divagues.

Un bus paso , con rostros de personas alteradas apoyados contra las ventanas empañadas. Rogaba que Tae no estuviera allí para verme tirado y con mi nariz enrojecida por el frío. Mi corazón latió como un tambor tan solo de pensar en el. Es lindo y guapo , con un pelo castaño oscuro que se riza en la nuca y una sonrisa cuadrada que últimamente me hace sonrojar. Esperaba que algún día me pudiera ver como una persona fantástica , divertido y atractivo que realmente soy , y no solo como un compañero de clase común y corriente. Algún día , si lo seguía deseando de verdad tal vez algún día me incitara a salir.

-No te muevas jovencito.

Un hombre se agacho junto a mi y me saco de mis ensoñaciones con Tae. Alguien lloraba , ¿Como se atrevían ? Si alguien tenía permiso de llorar era yo. Yo era quien estaba en problemas con casi media cara rota.

-Vas a estar bien -dijo el hombre para tranquilizarme

Una sirena comenzó a sonar en la distancia. La calle vibraba con el peso de los autos que no dejaban de rodar : la gente seguía adelante con su vida. Era un alivio saber que no todo el mundo tenia que detenerse para echar un vistazo. Yo no debía estar tan mal después de todo.

-Ya viene la ambulancia.

La mano firme del hombre se sentía tibia y reconfortante agarrando la mía , que temblaba. Trate de recordar si tenia la mejor ropa interior , mi abuela siempre bromeaba que uno debía usar ropa interior bonita por si acaso sufría un accidente y debía ir al hospital. Tenia la horrible sensación de que la había decepcionado pues llevaba una desgastada y percutida ese sábado.
Mi visión comenzó a ponerse borrosa , como un televisor mal sintonizado después divise a mi madre frente a mi , con su hermoso pelo ondulado flotando frente a su rostro en forma de corazón. También tenia una suave y tersa piel blanca y una  pequeña nariz pulida. Se veía joven para su edad , o tal vez así lo había sido hasta que papa comenzó a hacer tonterías. Trate de levantar un brazo para ver el reloj . Debían ser mas de las seis y papa ya estaría en casa.
Cuando trate de moverme un dolor repentino inundo mi cuerpo y una sensación helada lo  recorrió desde los dedos de los pies. La superficie de la calle ya no se sentía muy solida. Parecía como si el asfalto se estuviera ablandando debajo de mi. Un ruido blanco ensordecedor llenaba mis oídos y ahogaba el canto de un mirlo. Yo quería oírlo cantar.
En ese momento comencé a luchar para respirar con fuerzas mientras el miedo me invadía. Ahora alguien mas estaba llorando y yo sentía dolor. Demasiado dolor en todo el cuerpo. El cielo estaba muy hermoso pero se están oscureciendo. El llanto era mas fuerte. Quería que se callaran. ¡Callénse ya! Me están asustando , justo antes de perder la conciencia me di cuenta de que el llanto era mio ...