Capítulo 19

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Fue el guardia.

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Kagome POV

Estiré mis bazos y piernas, y abrí perezosamente mis ojos. Lentamente me senté en la cama y vi que Sesshomaru estaba sentado en uno de los sillones de la habitación leyendo algún tipo de documento.

Me quedé viéndolo fijamente, él solo volteó a verme y siguió leyendo sin ningún interés en mí. Me levanté de mi cama y vi en unos de los espejos que estaba totalmente despeinada, como si alguien hubiera movido mi cabello, así que me acerqué a mi maleta para buscar un cepillo de cabello y vi que estaba toda desordenada, todo estaba movido de lugar. Ya sabía quién había sido.

- Sesshomaru - comencé a decir con una sonrisita en mi cara - ¿sabes si alguien ha tocado mi maleta? - pregunté. 

- No - respondió, seguía leyendo otro documento. Parecía ser serio porque se veía un poco molesto.

- Así que nadie tomó mi maleta, ¿verdad? - pregunté de nuevo, debería agradecerme por darle una segunda oportunidad para que me dijera la verdad.

- Sí - dijo, pero esta vez noté que no me estaba poniendo atención, así que decidí comprobarlo.

- Ah, ¿dices que amas a Inuyasha, tu hermano querido, de todo corazón? - pregunté poniendo mis manos en mis caderas.

- Exacto - dijo, luego reaccionó y se corrigió - ¡No! ¿pero qué dices? - preguntó molesto.

- ¡No me estás escuchando, Sesshomaru! - dije - ¡te pregunté si alguien tomó mi maleta! - grité señalándola.

- Yo la tomé - dijo molesto - pero eso no es importante ahora - dijo.

- ¿No importa? - pregunté.

Él en verdad estaba preocupado, lo podía escuchar en su voz, de seguro debía ser lo que estaba leyendo.

- Sesshomaru, ¿qué pasa? - pregunté.

Gruñó un poco y luego me respondió.

- El señor del Este avisó que vendrá dentro de dos días - dijo cerrando los ojos - cuando venga deberías cubrirte el cuello - comentó señalando su cuello y saliendo de la habitación.

¿Cubrir mi cuello? ¿Por qué debería cubrirlo?

Caminé hasta mi maleta y después de buscar un rato, por fin pude encontrar el cepillo. Me dirigí al espejo y comencé a desenredar mi cabello, finalmente me hice una coleta y me puse de perfil para ver cómo había quedado. 

Me atraganté al ver que a un lado de mi cuello había una notoria marca, debió haber sido el beso que Naoko me dio. Aunque lo peor de todo es que Sesshomaru se había percatado.

Solté mi cabello y con él cubrí la marca. De seguro Sesshomaru está furioso. ¡Todo por culpa de Naoko!

Suspiré. Igual, debía devolverle A Rin la pulsera que, literalmente, casi me mato buscando.

Caminé y entré en su habitación, ella estaba dormida, lo que es un milagro. Dejé la pulsera en la mesita junto a su cama y salí de allí.

Debo buscar a Nanami, necesito hablar con ella sobre lo que sucedió, de seguro está preocupada. Fui a la cocina, que tal vez ahí sería donde ella estaría y en el camino me encontré a la persona que no quería.

Naoko está a unos pocos metros de mí. Aún no quería encontrarmelo, debía hablar con alguien sobre esto antes que con él, Nanami era la mejor opción porque no podía ir con Sango ahora, pero le contaría después.

¿En qué estás pensando, una humana?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora