Alfonso se salió de mi habitación con el ceño fruncido, se que fue un golpe bajo, pero es mejor cortar de raíz el asunto, no puedo dejar que construya una fantasía en nuestras cabezas de que seremos felices. Apagó la luz y me voy directo a mi cama estoy bastante cansada como para revisar mi celular así que solo lo pongo a cargar cierro los ojos y rápidamente caigo rendida en los brazos de Morfeo.
"Narra Alfonso"
Sophia me hace daño, desde que nos conocemos lo hace.
Ella no sabe que cada vez que me mira con sus hermosos ojos café y me dice que no quiere estar conmigo hace que quiera luchar mas por ella. Está noche será larga, tenerla tan cerca y no poder mirarla a los ojos, no poder besar sus hermosos labios, no poder abrazarla y sobre todo decirle cuanto quisiera que creyera en mis palabras.
Dormiré con Steven, el es un buen muchacho. Tomé una corta ducha y me puse mi pantalón de pijama con un camiseta de "Los Simpson". Me acosté en el lado izquierdo de la cama -Buenas Noches Steven- dije poniéndome de frente a la pared. -Duerme bien Alfonso-. Me dormi lentamente, soñando que Sophia aceptaba estar conmigo. No puedo dormír, las 4:00 necesito un vaso con agua, me paró con cuidado para no despertar a Steven, cuándo paso por la puerta de Sophia tengo la tentación de abirla, pero respetó su decisión de no querer estar conmigo. Aunque me vuelva loco!
"Narra Sophia"
Me despierta una punzada intensa en el tobillo, necesito una pastilla para el dolor las cuáles Tia Nad las puso en el gabinete de la cocina. Caminar hasta allá no esta en mis planes por lo que buscó mi celular a tientas marca las 4:04 AM, revisó las redes sociales y el dolor no pasa. Me levantó de la cama con cuidado de no lastimar mi tobillo con ese horrible dolor que siento. Bajó despacio las escaleras y siento un ruido que proviene de la cocina, ahora no sólo siento dolor, sino también miedo; Sigo caminando despacio, cuándo entro a la cocina el sujeto deja caer un vaso de aluminio. -Me asustasteeeee!- le grito no tan alto para no despertar a los demás en la casa, menos mal que era Alfonso. -Y tu a mi- Dice recogiendo el vasó que dejo caer antes al piso.
Caminó hasta sentarme en el banco del desayunador y subiendo mi pie adolorido en otro. -Alfonso necesito tu ayuda-Le dijo aguantando mi orgullo. -Qué necesitas?- me dice acercándose a mi. -Buscame una pastilla para el dolor qué se encuentran en el gabinete de abajo-dije señalando el mismo. -claro! - dijo Alfonso buscando la pastilla, me buscó un vaso con agua y los puso frente de mi. Lo cogí y me dispuse a beberme la pastilla, Alfonso buscó hielo y lo puso en mi tobillo hinchado nuevamente. (Estaba siendo muy amable conmigo sin merecerlo). No dijimos nada, sólo nos mirábamos fijamente a los ojos, su mirada aún me hipnotiza. -Sophia, puedes confiar en mi y decirme porque no permites que te quiera!- Cómo se atreve a decirme eso, no dejo que me quieran porque me decepcionan, porque siempre dicen que es diferente.
"Todos siempre comienzan distinto, pero terminan en lo mismo." -No es porque no quiera, es simple no dejaré que me lastimen-. Le dije sin mirarlo. -Pero ya te dije que no está en mis planes lastimarte.
-Todo el mundo dice eso, hasta que llega el día en el que se lo olvidan sus palabras. Me dolía tener que alejarme dr él, en verdad me estaba gustando mucho, pero mi orgullo y mi falta de confianza difícilmente me permiten darle paso al amor..
-ven!- Me dijo Alfonso dándome la mano, vamos a sentarnos en la sala.
No dije nada, camine como pude hasta la sala y el me ayudaba *-*
Me senté subiendo mis pies a lo largo; Alfonso levantó mis pies y me sentó poniéndolo encima de sus piernas, no podia quitarlos porque lo estaba sosteniendo. -Sophi si no te arriesgas en la vida siempre te quedarás estancada en lo mismo y nunca te permitiras ser feliz y disfrutar de las pequeñas cosas que te brindan la vida y que a la vez te llena, todo en algún momento te lastimara, porque ese es nuestro destino, pero tenemos que aprovechar las altas y las bajas de la vida. No sabía que decir ante esto, no podía negarlo porque se perfectamente que tiene la razón. -Pero eso implica volverme vulnerable ante alguien, y ya he sufrido demasiado, no estoy dispuesta a seguir lamentando cosas que pude haber evitado- Dije derramando unas lágrimas. -Sophi, hermosa no llores-dijo acercándose mas a mi y con sus dedos limpió las lagrimas que recorrian mis mejillas lentamente, haciendo que me sonrojara. -No puedo! porque no me entiendes? si me gustas, pero no puedo entregarte mi Corazón, además nisiquiera nos conocemos bien. -Tendremos mucho tiempo para eso, sólo tenemos que saber espera, además tu también me gustas "demasiado". Dijo eso acercándose mas a mi, tomó mi rostro con ambas manos y lentamente se acercó a mi -puedo?- dijo susurrando. Asenti; Ya había besado antes, pero ninguno beso se compara con este. Cuándo abrí un poco la boca aprovechó para entrar su lengua en mi boca, permitiendo que se enrredaran, cuando bajo una mano de una rostro poniéndola en mi cadera para así acercarme más a él; No me di cuenta cuándo me senté a ahorcadas en él, el beso se subió de tono, tenía mis dedos enrredados en su pelo y Alfonso tenía sus manos en mi cintura eso me dio mas tranquila porque en ningún momento me falto el respetó, y que me preguntará si podía besarme fue taaan bello de su parte, se despegó un poco de mi boca -Me vuelves loco!- dijo susurrando cerca de mis labios. - Y tu me encantas! - ohhh aún me queda un poco de voz! Volvimos a besarnos, pero esta vez fue como una necesidad, con mas pasión, rapidez y deseo. Sentía su erección debajo de mí y saber que yo habia provocado eso me hizo sonrojar, besandolo con mas intensida. Tenía que parar esto ahora o no podríamos parar después.
Me aleje de sus fantasticos labios -Alfonso tenemos que parar-. Yo la verdad es que JAMÁS quería alejarme de sus labios, pero sería lo mejor. -Y si no quiero? - dijo en tono burlón! -Tenemos que hacerlo- Volví a besarlo, no podía resisitirme. Así duramos bastante tiempo, demostradonos el deseo que teniamos acumulado todos estos días. -Sophia- Dijo Alfonso alejándose unos centímetros de mis labios aun hinchados. -Si- Dije temblando. -Por favor dime que quieres ser mi novia, por favor?- Dijo sonrojado. -Alfonso el mas romántico del mundo- dije en tono burlón bajandome de él sin recordar mi tobillo. -Sophia te prometo que te pediré de manera formal que seas mi novia, con tus tios presente y todo, pero mientras dime que si para poder seguir besandote.
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Como que me enamore?
RomanceComo es posible que antes de enamorarte de otra persona no te enamores de ti misma? Esta es la historia de Sophia, una joven de 16 años la cual afronta nuevos cambios en su vida en una dificil etapa. Esta historia es para los jovenes que se sientan...