|SENTIR|

1.6K 150 20
                                    

Juvia no puede más

Ya recibí mi respuesta. No es la que tú hubiera querido por supuesto pero es la que recibí.

Aún no entiendo cómo es que Gray-san no hizo nada. El pudo haber tenido por lo menos la cortesía de decírmelo el mismo y en privado, pero prefirió que otros hablarán por el.

No sé cómo reaccionar después de todo esto, me siento tan abrumada y la tormenta que está afuera no va a parar.

Solo por esta vez voy a dejar de pensar en lo que los demás quieren y voy a pensar en lo que yo necesito.

Vuelvo a ser la mujer de la lluvia, la mujer que nadie quiere, que todos desprecian y odian. Esa soy yo.

No sé cuánto llevo llorando ya, pero mis ojos arden. Me levanté de la cama y decidí ponerme un camisón largo. Fui desabotonando uno a uno cada botón y me saque el vestido. Coloque el camisón largo de color blanca y volví a llorar. Llorar no hará que Gray-san me ame, pero por lo menos logrará que una parte de mi saque toda su impotencia y frustración.

No sé cuánto a pasado ya. No recuerdo cuantos días han venido Lucy-san o Erza-san a preguntarme cómo estoy y traerme siempre una canasta llena de comida, chuches y algunas cartas, como si de alguien enfermo se tratara.

Valoró sus gestos.

Desde hace ya varios días a estado sonando un ruido en el cristal de mi ventana. Pero nunca he tenido la fuerza para ver qué es. Es solo que esta vez parece como si quisieran romper el cristal entonces es ahí cuando decido envolverme en una frazada color morado que Lucy-san me trajo en una de las canastas, me levanté de la cama y me dirigía a la ventana.

¿Qué hace aquí?.

Creí que tenía una misión. Debió suspenderla por la lluvia y seguramente viene a pedirme que pare. Haaa siempre soy una molestia.

Abrí la ventana para que la persona que esta afuera entrará con tranquilidad.

Lo siento Natsu-san pero Juvia no puede parar la lluvia para que vaya de misión— agache mi cabeza, estoy en condiciones deplorables y nadie merece verme así.

¿Cómo estás? No más bien... ¿Sigues igual?— debo de estar escuchando mal. Pero su voz expresa preocupación de la más pura, seguramente ya me estoy volviendo loca.

Juvia no lo sabe

Sabes, me gusta esta imagen tuya.— sostenía mi mentón para alzar mi cabeza hasta que mis ojos se encontrarán con los suyos.
De alguna forma verte con el cabello revuelto, tu rostro hinchado, ojos irritados y vestimenta de casa es endemoniadamente lindo— pasa su mano por uno de los mechones de mi cabello hasta llevarlo detrás de mi oreja, después de es pequeño recorrido el plantó su mano suavemente sobre mí mejilla, se siente tan cálido, tan bien... 

Si, definitivamente debo estar volviéndome loca, el no puede estar sonrojado, por lo menos no por mí.

O no, le dio fiebre por estar tanto tiempo en la lluvia que se resfrío y ahora morirá y Juvia nunca más podrá disculparse y la muerte de Natsu-san será culpa de Juvia.

Te queda—salí de mi trance y la sonrisa que me regaló me dejó increíblemente deslumbrada.

¿A que a venido Natsu-san?— más confundida no podía estar, ¿Que es lo que busca?.

Si me crees o no me importa un grano de mazorca pero vine a verte— su sonrisa se desvaneció y puso una expresión completamente sería, una que nunca había visto en el. tampoco es como que lo vea mucho, a decir verdad jamas vi mas haya de Gray-san nunca vi que a pesar de eso las personas del gremio ya me consideraban parte de su familia y eso me hace sentir mal, por ser tan siega y cerrarme tanto a solamente una persona, estaba tan deslumbrada por la amabilidad que Gray-san me había  mostrado en ese momento que no veía toda la amabilidad que recibí de el resto de las personas, de el resto de mi familia.

Eso no puede ser cierto, Juvia y usted nunca antes habían hablado hasta hace poco— me moví unos pasos atrás y quito su mano de mi mejilla pero inmediatamente sentí un escalofrío.

No necesitamos hablar para que quiera verte— el debería dejar de usar ese tono conmigo o las personas pueden mal interpretarlo.

Juvia no entiende

Tengo ojos Juvia, puedo ver— se acercó peligrosamente a mi rostro, junto su frente con la mía y serró sus ojos. Puedo sentir como mis ojos están apunto de salirse de sus órbitas por la impresión.
Ahora dime... ¿Qué es lo que sientes?

J-Juvia se siente... Destrozada— ya no pude más. Dejé caer la frazada y encorve mi espalda. Comencé a llorar, pero no solo eso, sollozos increíblemente fuertes salían de mi boca, en verdad necesitaba que alguien me hiciera esa pregunta.

Ahora me sentía devastadamente protegida. En el momento que comencé a llorar los grandes y fuertes brazos de Natsu-san me envolvieron en un fuerte y cálido abrazo. Seguía llorando en su pecho pero aferrada a el mismo.

No me importa cuanto tarde. Te prometo que me quedaré aquí hasta que estés mejor— susurraba esas palabras a mi oído y yo apesar de no haber dejado entrar a nadie más a mi habitación el logró entrar y no se porque pero algo en sus palabras, tal vez la calidez en ellas hace que quiera  que verdaderamente cumpla su promesa.



















yo no se si mi celular es estúpida o que le pasa pero no puede ser que no me funcione la maldita aplicación estúpida HAAAAAAAAAA!!!!!!! wenooo :3 me gusto este capitulo y espero que también a ustedes. sin mas que decir gracias por leer, no olviden darle estrellita, amor y paz nos leemos en el siguiente capitulo.

LO BUENO |Navia|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora