LO BUENO |Navia|

|IMPULSOS|

He estado al rededor de quince días en el departamento de Juvia, todo claramente autorizado por Erza y jamás había estado más feliz.

Toda mi estadía aquí se a basado en hacerla sentir bien. Y ¿Como lo hago?, Escuchándola. Me a contado desde su vida en el orfanato hasta su llegada a Fairy Tail y como por primera vez se sentía parte de algo más grande.

Me hace inmensamente feliz que ella me tenga esa confianza, todas esas cosas que me dice tan personales y llenas de sentimiento me hacen sentirme parte de las personas importantes de su vida.

Las lluvias han parado considerablemente habeses llovizna suave y otras veces cae una tormenta, todo depende de que sea lo que me cuente. Mi intención es que logré desahogarse para que después este dispuesta a salir y decirle al idiota de Gray que ya no lo necesitas.

En este momento me dirijo de regreso a su departamento ya que en estos últimos días yo he estado recogiendo las canastas de comida y cosas varias administradas por Lucy. Voy un poco más retrasado que otras ocasiones y esto por qué no pude evitar escuchar una conversación que me desagrado mucho. Por lo que me he enterado por parte de Erza esa no es la primera vez que surgen ese tipo de conversaciones así que después de quemar unas cuantas mesas salí de regreso a casa de Juvia. El tiempo que yo paso fuera ella aprovecha para bañarse y otras cosas que no me dice pero...

¿Por qué comenzó a llover de nuevo?

Corro lo más rápido que pudedo y al llegar ahí entre por la ventana y suelto la canastilla al piso al sentí como Juvia me abraza fuertemente escondiendo su cara en mi pecho, lo humedo de sus lágrimas traspasa mi ropa y su forma de aferrarse a mi de alguna manera me hace sentir protegido. Sus sollozos logran sacarme de mis pensamientos.

—Hey Juvia, ¿Qué pasa?— comienzo a acariciar suavemente sus hermosos y mojados cabellos que desprenden un delicioso aroma a jabón.

—¿Por qué tardaste tanto?—

—Solo tuve un contratiempo, me entretuve con la gente del gremio bonita—

—J-Juvia pensó que Natsu-kun ya no volvería y dejaría a Juvia sola— se aferraba mas firme a mi torso cosa que me causa mucha gracia y ternura.

—Te dije que no me separaría de ti hasta que te sintieras mejor— le levantaba la cabeza sosteniéndola suavemente de sus mejillas mientras veía sus hermosos ojos azules, ahora cristalinos.

—Natsu-kun...— susurró suavemente al mismo tiempo que un color carmín adorna sus blancas mejillas.

Un Momento...

Yo soy una persona de impulsos y está situacion me está funcionando ¡NADA!. Lo frágil que se ve en estos momentos solo me dan ganas de abrazarla y besarla hasta que quede completamente desgastada.

Me he estado controlando demasiado, hasta el momento no recuerdo un solo día que no allá causado ningún impulso en mi y en este momento no es la excepción.

Mantengo las manos en sus mejillas y comienzo a acercarme peligrosamente a sus labios rosas, pero no puedo detenerme y tampoco quiero.

Así que la besé, ella sierra sus hermosos ojos azules y después yo. La junto más a mi pecho, grave error, ahora siento sus senos apretarse contra mí cuerpo mientras ella suelta un gimoteo que solo provoca que mi lengua entre en su boca que ¡POR MAVIS! ¿Como es que se siente tan bien?. La falta de oxígeno se hace presente y me separo de ella dejando un ligero hilo de saliva. Escucho su respiración agitada mientras mantiene sus manos en mi pecho.

—¿Q-Que significa esto Natsu-kun?—

—Te confesaré algo Juvia, tu...— vamos Natsu es ahora o nunca.
—Tu me gustas desde hace mucho tiempo, todas esas veces que casi incendió el gremio fueron porque veía como el idiota de la nevera andante te trataba y tú mereces mucho más, mereces alguien que te escuché y que valore cada parte de ti, con el que puedas ser tú misma sin temor a que te juzgue. Tal vez yo no te merezco pero hasta que tú no estés bien yo no pienso salir de tu vida, prometo que si me das la oportunidad de ser el hombre de tus pensamientos haré que se te pase el tiempo sin pensar en Gray, yo lo que más quiero en esta vida es vete sonreír de nuevo— un silencio abrumador se hizo presente en la casa pero no me preocupo, ya se su respuesta y al contrario que otras personas mi sonrisa se hace muy grande. El cielo comenzó a despejarse dejando ver una hermosa puesta de sol.

—J-Juvia no sabe si esto es verdad o solo es un juego para usted Natsu-kun— quitó sus manos de mi pecho y retrocedió unos pasos.

Rápidamente tomé su manos depositando un beso en esta y la mire de nuevo a los ojos.

—Esperare el tiempo que sea necesario bonita— le sonreí nuevamente y ahora ella era la que me estaba besando y como soy un hombre de impulsos claro que le correspondo.

—J-Juvia acepta Natsu-kun— juntó su frente con la mía y sonreía de una manera tan hermosa que solo me jure una cosa.

Protegeré esa sonrisa hasta mi último aliento.

PERDOOOOON!!!! Neta les juro que se me olvidó completamente que ayer tocaba capítulo lo siento mucho. Pero ya está aquí y no pasa nada, la verdad me gustó este capítulo y me gustaría escribirlo otra vez para sentir satisfacción ajá jajaja.
No olvides darle estrellita, amor y paz y nos leemos en el siguiente capítulo.