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-¡Vamos , idiota levántate!

El sonido del despertador me altera, doy un brinco en la cama y termino sentada con el corazón latiendo me a mil.

Parece ser que no dormí nada, mis ojos están pesados y mis ganas de levantarme están al otro lado de la puerta de mi habitación.
La oscuridad en la calle es demaciada por lo que decido revisar mi despertador.

Y Mierda, todavía no ha sonado.

Definitivamente los tragos de anoche me hicieron mal y aparte aquella presencia sólo hizo que mi campo de igualdad se inclinada minimamente hacia un lado.

Pensé a media noche escambullirme hacia la cama de mi papá, y lo intenté, pero no lo terminé, solamente me asomé en la puerta y él estaba hablando por teléfono.

Susurros incomprensibles.

Así que mi manta y yo, volvimos a mi cama.









-No puedes reprobar la materia de química- reprochó.

-yo tampoco lo quería, la vida es así...la vida te da sorpresas...-contesté de la manera más obia, mientras cogía la botella de agua-...sorpresas te da la vida.

- ¿acaso no sabes copiar?, química debe ser fácil,  tiene que ser fácil.

-oh, si claro Jeffrey, habló el dueño de empresas y el que obtiene dinero fácil así- chasque los dedos, para dar énfasis en mí última palabra.

Rió negando con la cabeza, y empezó a darme ideas de como recuperar el semestre en estos dos meses que quedaban de clases.

-¿y si mejor le doy una buena mamada?

Frenó en seco, el carro que venía detrás de nosotros logró parar y al pasar por nuestro lado gritó un par de maldicones, aproveché para bajar la ventanilla y sacarle el dedo del medio.

-Dudo mucho que sepas hacer una, y quiero que sepas que las historias eróticas que lees no te harán de mucha ayuda- respondió cuando volvió a tomar carretera - básicamente son relatos que con tan solo una caricia te han llegar al orgasmo...son...

-Irreales- repetimos al mismo tiempo.

-Exacto, y no querrás que el pene flácido de tu profesor química sea el primero- no pude evitar sonreír a lo que él imitó.

-¿quien dice que será el primero?

En coche aparcó en la parte de atrás del colegio, era temprano, anoche había dormido en su apartamento.

Inmediatamente, abrí la puerta pero no baje.

Lo miré.

-¿puedo pasar por tí a la salida?- habló.

- lo dudo mucho, esta semana voy a desaparecer- su cara fué de preocupación y frunció el ceño- me refiero a que quiero estar sola, necesito... pensar...- No encontraba otra palabra para describirlo.-Una amiga va a llegar al país, así que la pasaré con ella.

-entonces ¿ya no podré verte?-colocó la mano en mi pierna, justo encima de mi rodilla y la apretó agarrando hasta el hueso y haciéndome sobresaltar.

-serás imbecil - hablé en un quejido.- la próxima semana.

- te encontraré viva para la misa de Sasha, ¿verdad?-Sasha es mi mamá.

-Tranquilo,  tirarme de un puente ya no está en mis opciones- salí del coche y crucé hacia el lado de su puerta- Talves en una balacera,  sería más emocionante- sonreí.

CruzadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora