La luz de mis ojos (Taylor lautner) Corrigiendo

capitulo veintitrés

CAPITULO VEINTITRÉS

Siva está bastante agobiado los últimos días no solo tiene problemas en su trabajo en el hospital sino también en el edificio donde el por mala suerte resultó ser el encargado 

—Yo te ayudaré —Sonreí abrazándolo por la cintura 

—Eres un sol — me toma de las mejillas para besarme

—Lo sé tranquilo todo estará bien yo te ayudaré en tu edificio 

—El nuevo inquilino vivirá con su hermano pero resultó ser un completo imbecil arrogante no lo conozco y no quisiera conocerlos — estalló 

—Ya déjalos ir cariño —vamos a tu casa —Lo ánimo  dándole pequeños  masajes en su espalda tome su mano para irnos al departamento 

—Llamaré al ascensor en lo que estacionas el automóvil — propuse dejándolo solo, reviso mi teléfono en lo que el ascensor llega al sonar levanto la mirada para encontrarme con quien creí haber superado 

—Taylor — Balbuceó sin que pudiera escucharme ¿que hace aquí? Trato de contener cada emoción que provoca en mi odio este se tiende do odios lo que puede ser capaz de provocarme incluso después de el tiempo  

—Jade —Su rostro muestras sorpresa y sus ojos se iluminan No puede ser Jade amor — Taylor se acerca pero me alejo

—¿Aléjate de ella ?—Escuchó una voz poco amigable Siva llega a mi lado 

—Jade debemos hablar por favor — suplica 

—Creo que me confunde — niego 

—¿Te confundo? Nunca podría confundirte por favor — Taylor intenta tomar mi mano pero Siva se interpone entre nosotros 

—Que te alejes de ella — Un grito sale de Siva 

—Estas loco — Grito al ver el puño de Taylor estrecharse en el rostro de Siva — Lárgate —Lo miró molesta 

—Está es mi casa y hablaremos eso te lo aseguro te amo y te amaré hasta que me muera — nuestras miradas se fijaron y salió del edificio. Taylor paso chocando su hombro con el de Siva, Jade sostuvo del ante brazo de su novio evitando una pelea que seria totalmente innecesaria.

Tantas preguntas sin responder sin saber que hacer, me encuentro acostado en la sala del sofa de Marie, por más que intento sacarla de mi mente no puedo ella avanzo esta con alguien más el desprecio que me tiene lo merezco más que nada, por dejar manipularme por mi padre, me hizo creer que todo lo que necesitaba era dirigir la empresa, cuando todo lo que había necesitado es a ella. Jade esa mujer que soporto mi humor cuando creí que nada tenia valor una mala decisión provoco que perdiera la vista, y de nuevo una mala decisión me hizo perderla.

Esta noche sufrí insomnio tengo tantas cosas en la cabeza que no pude conciliar el sueño. Observe aquel amanecer increíblemente hermoso por la vista de la ventana. Lo contempló varios minutos antes de ir a tomar una ducha, no podría fallar en mi nuevo empleo no a Kevin quién confía en mí.

Al salir de la habitación me acomode la corbata esta vez si la utilizaría, mi madre se tomó la molestia de mandarme algo de ropa luego se que me echarán a la calle.

Marie aparece detrás de mí y se aproxima para ayudarme con la corbata.

—¿Necesitas ayuda con eso?.

Niego con la cabeza, estoy más que seguro que puedo atarla por si solo, pero ella parece ignorarlo y lleva sus manos para terminar de arreglar aquel nudo. Desliza sus manos por mi pecho dejándolas allí, nuestras miradas se fijan algunos momentos,  sus labios repentinamente terminan con el espacio entre nosotros  Marie sostiene mi rostro intensificando aquel beso que se vuelve apasionado.

Lleve mi mano a su cintura con un delicado empujón la alejó de mi.obligandola a retroceder.

—Marie Creí que ya todo estaba dicho.. No existe un nosotros.

Lo que menos pretendía era que Marie creyera una idea equivocada de mi presencia aquí, acudí a su llamado de Auxilio pero eso no significa que la ame.

—Perdóname me dejé llevar por la idea de tener una familia.

Sus disculpas por primera vez fueron sinceras, paso una mano por sus hombros atrayendo la a mí, ella rodea mi cintura soltando leves sollozos. Deslizó mi mano por su espalda dando leves masajes para calmar sus sollozos.

Ha pasado un mes un ¡maldito mes! Desde que ella dejó  de frecuentar el edificio donde su novio vive, me evita y eso me está volviendo completamente loco, Shawn no menciona absolutamente nada, Cree que así dejaré de pensar en ella, que dejaré de buscarla pero eso solamente hace que la quiera buscar más, solo necesito escuchar su voz al menos una última vez.

—¡Mira lo que me han regalado!
Marie apareció por la puerta mostrándome un pequeño vestido de color rosa, sonrió al verme.

—¿Estas segura que será una niña?

Le pregunto con muchas dudas, solamente tiene dos meses y ella siente que será una niña.

—hoy  tengo un ultrasonido... ¿Te gustaría ir conmigo? — Mordido su labio inferior

La mire unos segundos pensando en que responderle es una visita importante y no creo que merezca ir sola

—¿A qué hora es la cita?

—Al Medio día

—Perfecto estaré esperándote en el consultorio —Dije antes de salir de aquel departamento los últimos días me estuve dedicando a buscar departamentos supongo que es momento para irme sin embargo el pensar dejar sola Marie me mantiene preocupado ¿Que tal si algo le pasa? Y no tiene a nadie que pueda ayudarla, la escuché hablar con su padre quien sigue rechazando la, las cosas para ella no han resultado muy fáciles, como tampoco lo han Sido para mí, la mujer que amo está en otros brazos y me preguntó si me seguirá amando como yo la ama. Aveces hay momentos en  los que me preguntó si debería dejarla ser feliz pero el solo pensar que su felicidad no soy me vuelvo loco. Me duele mucho verla sonreír con otro hombre, verla besarse con alguien más, la veo muy feliz. Lo primero que hice fue pedirle permiso a Kevin para salir al medio día, había prometido acompañarla y lo cumpliría, nunca me imaginé en una cita para un ultrasonido para un bebé que no es mío pero siento mucha emoción y eso ciertamente me incómoda.

— Que puntual —Sonríe al verme llegar

— Nunca lo fui pero hoy será la excepción —Le di ánimo y me senté a su lado para esperar que alguna enfermera nos llamará, Marie recargo su cabeza sobre mi hombro sin dejar de mirar el reloj en la pared, su ansiedad por qué pasará el tiempo tan rápido era muy evidente.

— Estoy muy nerviosa —Respiro hondo para después dejar salir el aire.

—¿Señora avgeropoulos?

A los pocos minutos La voz de una enfermera llamo muestra atención y una vez que nos encontró nos guío adentro del consultorio, la sonrisa en mi rostro dejo de tener fuerza al ver el rostro conocido.

—Siva...

Marie nos observo detenidamente la tensión que se formó en la habitación se podía sentir a Kilómetros, Allí está el hombre que odiaba, mi mirada recorrió el lugar y se detuvo en una pequeña estantería, un cuadro con decoraciones rosas luce tan jodidamente bien, el tiene una maldita foto de ella en su consultorio y no puedo lidiar con esto. No puedo hacerlo.

— Tomen asiento por favor — Señalo los asientos enfrente de su escritorio con una sonrisa amistosa pretendió no darse cuenta de mi inconformidad por aquella foto que inconscientemente disfrutaba a sus adentros por hacerme sufrir de esta manera.

Este capítulo va dedicado para una fiel lectora AnaLaverde

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