El Dragón Emperador Del Fin

Capítulo 2: Nace el Séquito

Aquí el capítulo 2 de el dragón emperador del fin, sin mas, que lo disfruten.

- hola - diálogos

- hola - pensamientos o recuerdos

- [hola] - Draig y Albion

- hola - Bahamut u otros seres

- "hola" - llamadas u hologramas, cartas, mensajes.

Pov Issei:

Actualmente me encuentro en el bosque de los familiares siendo abrazado por una belleza de pelo azul con enormes pechos mientras yo todavía no salía del shock que me provoco ella.

Cuando salí del shock le pregunte:

- Espere Taimat-san, ¿Cómo es eso de que es mi prometida? – le pregunte mientras la separaba de mi pero pude escuchar cómo se quejó por lo que hice.

Cuando estaba por contestarme escucho una voz muy familiar:

- Deja que yo le explique Taimat – si, quien apareció fue mi viejo pero tenía una sonrisa maliciosa en su rostro y parece que contenía su risa.

- Bueno pa… ¿me puedes explicar el cómo es que Taimat es mi prometida? – le pregunte a mi viejo pero no pude evitar sonrojarme por la pregunta.

- Esta bien hijo. Veras… todo comenzó cuando todavía estabas en el vientre de tu madre. En ese entonces tu madre y Taimat eran como mejores amigas, pero a tu madre le devastaba que Taimat estuviera a punto de llorar cada vez que yo y tu madre nos demostrábamos cariño y porque el único macho al que ella se le declaro, ósea a Draig, la rechazara…

- Eso explica por qué te odia – le dijo al dragón sellado.

- … así que para hacer feliz a Taimat, y de paso evitar que estuvieras con una "zorra", se arregló que cuando cumplieras 18 te casarías con Taimat y con otra dragona más, pero solo si los dos tenían sentimientos por el otro.

- Ya veo – eso explica lo de prometido… *snif* gracias mama por comprometerme con esta belleza *snif*.

- Después de que te mandara con los Hyodo, Taimat se mudó al lado para cuidarte, pero durante ese tiempo parece que desarrollo fuertes sentimientos amorosos por ti. Pero tristemente tuvo que irse para ayudar a Ajuka Beelzebub con una investigación cuando tenías 8 años, pero sus sentimientos por ti parece que no solo no desaparecieron, sino que se intensificaron – termino de decir mi viejo para después ver de reojo a Taimat que estaba sonrojada y jugando con sus dedos (N/A: al puro estilo de Hinata).

Inmediatamente me puse a recordar mi niñez y recordaba a una mujer con las mismas características de Taimat, por lo que la historia de mi viejo era correcta pero después recordé cierto evento que me hiso sonrojar y Draig, viendo ese recuerdo, olvido todo el miedo que sentía a Taimat y se empezó a reír a carcajadas.

Desafortunadamente mi viejo se dio cuenta del sonrojo y me pregunto:

- Hijo ¿Qué pasa? Te noto sonrojado – me pregunto curioso mi padre pero solo negué con la cabeza y conteste con que no era nada.

Después de la explicación los tres nos dispusimos a irnos a casa pero Taimat no soltaba mi brazo que lo apretaba contra sus senos. Yo solo podía hacer una sonrisa nervioso por la sensación. Pero inmediatamente me acuerdo de algo muy importante: