Primer Paso

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<<Admitimos que éramos impotentes ante el alcohol y que nuestras vidas se habían vuelto ingobernables.

Primer paso A.A.>>

Kyle es asistente en un centro de Anónimos privado. No por que sea una pasión suya o por el placer de ayudar a los otros, es por el dinero que genera. Sí bien la mayoría de centros A.A es sin fines de lucro, donde trabaja se reciben donaciones de los "recuperados", que son bastante generosas en general. Ahí mismo también venden libros de autoayuda y demás porquería. Es un lugar más que nada religioso, por lo que estampas de <<Dios me ama>> se venden como pan caliente.

El centro sigue los doce pasos comunes de todo centro anti-droga, mezclados con diez cucharadas más de espiritualidad. A Kyle Le molesta y repugna sus métodos pero la paga es buena y necesita dinero extra. Después de la universidad pensó que sería sencillo encontrar trabajo, y aquí está, trabajando en una oficina y los fines de semana en un lugar que está a un paso de convertirse en una iglesia. El paraíso en tierra.

Hay personas que salieron de ahí en completa recuperación, no lo negaría, pero estas están condenadas a la abstinencia total para el resto de su vida, y sí bien el alcohol fue la base de todos sus problemas, en vez de enseñarles a manejar sus vidas sin depender del mismo, los internan en un miedo irracional al alcohol. Casi convirtiendolos en mitofobos. Las personas son débiles sí, quizás sea mejor que eviten el alcohol. Igual los mismos buscan otros estímulos a demás del brebaje, como el tabaco, por lo que seguirán el nocivo círculo. Pero Kyle no se meterá en sus vidas, solo cumplirá con su trabajo.

Está viajando al centro con sosiego, esta tarde se presentaría un nuevo grupo.

Baja del autobús y enfila hasta la sala donde se desarrollan las actividades. Práctica su falso entusiasmo por ayudar y entra, obviamente encuentra rostros desconocidos. Un asistente más se halla dentro. Un estúpido pelota para Kyle.

-¡Kyle!, ya estamos todos. ¿Qué tal si empezamos? - pregunta con un tono alegre que difiere con el ambiente triste e irritable de los presentes.

El pelirrojo se adentra en la habitación y toma asiento junto al otro coordinador. El mismo se asegura de que estén todos los miembros y finalmente empieza la reunión. Los coordinadores se presentan y después de unos minutos el asistente habla.

-Bien- examina a los presentes y apunta a uno-, usted, presentese.

Kyle observa al apuntado, es un hombre robusto, de cabellos castaños y ojos miel. Parece el menos entusiasmado por estar ahí. El hombre suspira.

-Soy Eric Cartman y soy alcohólico- habla de forma automática, como si ya hubiera pasado por esto antes.

-Genial, ¿por qué estas aquí?

-Porque soy alcohólico, duh- la clase ríe

-Eh... Sí, bueno, ¿Quieres compartir una experiencia con nosotros?

-No.

Responde de forma firme y seca. El asistente queda pasmado pero logra articular palabra.

-Esta es una reunión para conocernos, por lo que le voy a pedir que se abra con nosotros- Cartman rueda los ojos, y vuelve a negarse a hablar.

Finalmente el coordinador se rinde con él y se dirige a otra persona. Kyle observa a Cartman con curiosidad, este solo se dedica a mirar el techo con hastío.

La reunión termina con tres anécdotas que Kyle olvida con rapidez, queda bastante interesado por Cartman. Ninguna persona interactuó de esa forma con algún coordinador. Normalmente hablan por horas sobre sus vidas y su relación con el alcohol, incluso algunos se rompen en llanto, pero nadie fue tan áspero con ellos.

Antes de salir del centro truenos se escuchan, una tormenta eléctrica se desata frente a sus ojos. Agradece haber leído el pronóstico del tiempo. Abre su paraguas con la intención de retirarse.

Camina mientras observa los relámpagos, se dirige al mismo lugar de siempre. Divisa un cartel iluminado por luces de neón

Paseo Nocturno.

Sonríe. Encuentra irónico que el centro de rehabilitación se encuentre a cinco minutos de un bar tan grande y conocido.

Ingresa, el lugar es ruidoso como usualmente. Se sienta en la barra y pide un moonshine. Mientras espera su trago, examina el lugar. Está repleto de gente, pero una persona llama su atención.

Sentado en el taburete a su izquierda, el mismo hombre robusto de la reunión bebe un brandy con la botella a un lado a la vez que conversa telefónicamente con alguien.

-Sí... Sí... Acabo de salir de allí... Lo se, adiós - acaba la conversación y guarda su teléfono con un gruñido.

El barman llama a Kyle indicándole que su bebida ya está lista. Deja el vaso de vidrio en la barra y Kyle da un sorbo.

-¿Sales de una reunión de A.A y lo primero que haces es ir a un bar? - pregunta Kyle.

Eric se sorprende, observa pasmado al pelirrojo. Parece reconocerlo y vuelve a su trago.

-¿Qué?, ¿Vas a delatarme?

-Ya no es mi estilo.

Eric termina su vaso y se sirve .

-¿Qué haces aquí?, ¿no eres un coordinador de ese lugar?

-Sí, pero eso no evita que venga a beber- alza su vaso-, sin embargo para ti es diferente.

-Da igual, de todas formas no creo que me vaya a ayudar en algo

-¿Por qué? - cuestiona con genuino interés

-No es el primer centro al que voy.

Kyle saborea el alcohol, Cartman se ve indiferente al pronunciar esas palabras.

-Ya veo.

Quedan en silencio, el pelirrojo termina su moonshine y está a punto de ordenar otro cuando su vaso es llenado por brandy. Con el brandy de Cartman. Kyle se asombra por el gesto.

-¿Qué?, ¿muy fuerte para ti?

-Por favor...

Bebe todo el brandy de un solo trago y se ahoga. La tos lo ataca de golpe.

-¡Tranquilo!- dice Eric mientras golpea suavemente la espalda de Kyle-. El brandy no es algo que todos aprecien.

-Es horrible.

-El moonshine es horrible.

Eric rellena el vaso de Kyle por segunda vez y hablan de nimiedades por unos cuantos minutos.

-Entonces, si ya has pasado por muchos centros de habilitación. ¿Por qué? - pregunta el pelirrojo, con el décimo vaso de la noche.

-Soy un dipsómano, está claro- arrastra las palabras por la ebriedad -, ¿Alguna otra pregunta estúpida?

-Dices que nadie te puede ayudar... ¿Qué haces en el centro?

-Empieza a ser insoportable- masculla-, además... No quiero decepcionarla...

Eric sigue hablando pero Kyle pierde el hilo de la conversación, no bebe tanto y es algo débil al alcohol. Pasa casi toda la noche con Eric antes de salir del lugar. El castaño también tiene intención de abandonar el lugar, por lo que salen juntos. Kyle abre torpemente su paraguas y se despide del otro, quien solo se va.

Mientras camina a la estación de autobuses, piensa en Cartman. El gordo lo interesó en verdad, tiene curiosidad por saber sobre él, pero no se preocupa por ello y sigue su camino.

De todas formas, lo verá el próximo sábado.

¡La actualización más rápida del Oeste!.

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