flor;
— ¿algo más? — preguntó la cajera y negué.
busqué una caja saliendo de la fila y regresando con una en la que mis botellas queparan.
pagué con dos billetes de quinientos, con uno de doscientos y algunos pesos más de vuelto.
junté mis cosas y salí con pesadez. era sábado y tenía menos ganas de vivir que nunca.
de camino me encontré a un vecino que me alcanzó hasta mi casa, ya que quedaba de paso, agradecida lo invité a la previa que haría mi hermano hoy.
la verdad era que desde que llegamos, mi hermano, al igual que yo, pegamos onda con todos los pibes del barrio. y casi siempre nos juntamos a tomar algo o a comer.
agradecí al rubio y éste se despidió con un bocinazo, luego de eso entre a casa rápidamente ya que me estaba cagando de frío.
emanuel;
observé desde mi porsch a flor bajarse del auto de paulo, suspire negado a lo que mi cabeza decía.
a decir verdad, florencia me atraía mucho, y desde aquel encuentro en la cocina de mi casa me dejó loco. ¿y si a paulo le estaba ocurriendo lo mismo que a mi? no. paulo es sólo un amigo que salió con ella a hacer las compras.
entré adentro y traté de no reírme, estaba siendo totalmente posesivo. pero bueno, cuando nos gusta alguien es feo verlo con otra persona.
corrí a bañarme, no quería llegar tarde a la prev de hoy.
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kien kiere salir como amiga de la colo?
