my fuck*ng life

despedirse es difícil, mas si es de un amigo

David.- !¿ESTAS BIEN?¡ - la puerta de la pequeña habitación se abrió de manera tan repentina y estruendosa que asusto a los 2 amigos que estaban abrazados compadeciéndose.

Alejandro.- !¿PERO QUE TE PASA?¡, !¿QUE ESTAS LOCO O QUE PASA POR TU CABEZA?¡ - Ale parecía estar enojado, pero al terminar de gritar  parecía estar exaltado de una manera cansada, su respiración estaba exaltada y sus ojos parecían salirse de sus cuencas

Fernanda.- ¿Qué nunca te enseñaron a tocar antes de entrar?, vago - Fernanda le dio un golpe en la cabeza tan fuerte que hizo que David se cayera 

Alejandro.- ¿que quieres aquí? ¿no se supone que eres de otra sala? 

David.- si, pero pasaste por donde yo estaba, y la verdad te veías muy mal, parecía como si te fueras a morir, y pues... me preocupe - al decir esto ultimo la cabeza de David se inclino un poco - pero viendo que todo esta bien me marcho *abre la puerta*

Alejandro.- !oye espera¡ - Alejandro lo tomó del hombro y le dio vuelta - ¿por que te preocupas por mi?, si ni siquiera me conoces

David.- pues... es que.. mira tu mamá esta aquí - David al decir eso le dio el pase a la señora que estaba observando todo el escenario 

MDA.-  veo que ya estas mejor 

Alejandro.- si, Fernanda es muy buena para hablar 

Fernanda.- oh, por favor, - Fernanda no dejaba de mover las manos de un lado a otro, y se le hizo un tono color rojizo en la cara - no es para tanto... bueno si, me debes una, y yo opino que salgamos de nuevo

MDA.- nos encantaría salir de nuevo, pero hoy era el estudio de mi hijo, y ya se acabo, así que ya no tenemos motivos para estar aquí. Y tu, tu tienes que esperar a tu mamá 

la cara de Fernanda al escuchar esto se volvió triste, como si nunca hubiera sido feliz, una tristeza aun mas grande que la que tenia Alejandro, ella no quería perder a su nuevo amigo, a su mejor y único amigo

Alejandro.- mamá, ¿y si nos quedamos solo una noche mas? - Alejandro le suplicaba a su mamá 

MDA.- pero hijo, tu papá nos esta esperando, ademas, ya no tengo dinero como para pagar un hotel

Alejandro.- pero.. es que... agh, tienes razón - la voz de Alejandro se escuchaba derrotada, decaída y desesperada al no ver una respuesta

Fernanda.- bueno... ¿tienes skype?

Alejandro.- no, pero puedo hacer uno, buena idea, y así, cuando venga te puedo decir

Fernanda.- eso es perfecto, espero que vuelvas pronto.

David.- esto... ¿esto significa que te vas? - David salio de su escondite, atrás de la puerta, con los ojos llorosos y la voz quebrada

Alejandro.- !¿no se suponía que tu te habías ido?¡ - Alejandro parecía confundido, pero tenia una gran sonrisa en su rostro

David.- si pero no pude evitar escuchar todo, ademas... quiero ser su amigo - David al decir estas palabras quebró en llanto, como si fuera un niño chico - saben, aquí no hay gente de mi edad, mas que ustedes obviamente - David decía esto mientras las lagrimas brotaban de sus ojos, y su voz se cortaba entre espasmos de aire que no lo dejaban hablar como una persona normal

después de los 3 estar hablando por un rato, la mamá les dio privacidad y los dejo solos. Al parecer la actitud prepotente que adopto al conocerlos era porque quería hacerse el importante.

Las horas pasaron, la tarde se volvió noche y la mamá había ido a comer en lo que su hijo se despedía de sus amigos.

Alejandro.- prometo volver en este mes, y saldremos a todas partes solo nosotros 3, le diré a mamá que vaya a una tienda oh que vea una película, para que nos deje solos

Fernanda.- eso me parece excelente

David.- eso seria estupendo

Alejandro.- bueno, es hora de despedirme, mi mamá me esta esperando abajo.

al decir esto, a Alejandro se le llenaron los ojos de lagrimas y los abrazo, Fernanda y David no lo querían dejar ir, pero el tiempo se terminaba, y tenia que partir. 

Al salir del Hospital observo la ventana desde abajo, y observo a Fernanda y a David despidiéndose de el, Esto le ablando el corazón a Alejandro, haciendo que todo el camino a casa pensara en ellos y no dejar de escuchar musca. *paradise - coldplay* al sonar esta canción, Alejandro sonrió, pensando en su nueva amiga, pensando en lo maravilloso que fue ese viaje, y  las 2 amistades que hizo en el hospital, y pensando en que los volvería a ver algún día