La prima de mi Mahé + Epílogo [TERMINADA]

Capitulo 12

*Narra ____*

Estaba tirada en la cama hasta que un papel con algo escrito apareció debajo de la puerta. Lo agarré con intriga para ver que decía y también escuché el ruido de la puerta abrirse y después cerrarse. Me senté en la cama para leerlo con comodidad.

"Hola, si ésta carta no parece una carta, lo siento...no sé hacer cartas ni nada de eso.

Quería decirte si me querías perdonar por lo que hice. Ya sé que soy un gilipollas, lo sé perfectamente. No quise cagarla de esa manera, no quise acostarme con mi ex novia (que por cierto, no acepto que le haya cortado, y por eso dice que sigue siendo mi novia), no quise ponerme borracho, no quise decirte zorra, no quise decirte que quería jugar contigo...no quise hacerte daño. Eso es lo que menos quería hacer.

Me gustas demasiado, joder. Nunca me gustó tanto una chica como tú. Me gusta tu forma de reír, tu sonrisa, tus caras, tus ojos, tu pelo, tu personalidad, como eres...básicamente me gusta todo de ti; Me gustas tú.

Espero que perdones la gilipollez más grande que he hecho _____.

 

                                                                Rubén.

 

PD: Te amo".

Terminé de leer la carta y tenía un nudo en la garganta. Y noté que en papel en el que me había escrito esto, había puntos mojados, o sea, lágrimas que Rubius derramo cuando escribía todo esto.

Tomé una decisión y era perdonarlo. No eramos novios, así que prácticamente no hizo nada malo.

Decidí salir de casa de mi primo para ir a su casa sin avisarle a Rubius. Le mandé un mensaje a Mangel para decirle que me iba a casa de su mejor amigo. Agarré la campera y las llaves de su casa, y me fui. Tomé un taxi para ir más rápido. Seguro el ya estaría en su casa, así que sería una sorpresa.

*

Llegué en 15 minutos más o menos. Abrí la puerta principal del edificio y me fui directo para el ascensor. Toqué el botón del piso de Rubius y en segundos ya estaba ahí. Fui por el pasillo para ir a la puerta. Antes de abrirla, suspire. Abrí la puerta de la casa, entré y me dirigí al living. Y lo vi ahí sentado en el sofá mirando tele.

― ¿Qué-qué haces aquí? ― contesto nervioso. Yo sin contestarle, me tire encima de él quedando a horcajadas y me acerqué a él para besarlo. Un beso que decía que lo perdonaba. Después me separé y hablé.

― Te perdono, soy una pelotuda, no somos novios, hice un escandalo al pedo ― reí.

― Hey, aunque no seamos nada, hice mal, ¿o no? ― rió.

― Igual...soy una tarada.

― No, no lo eres ― sonrió.

― Che Rubius... ― susurre.

― ¿Qué pasa? ― él también susurro. Yo me acerqué a él.

― Te amo ― dije sincera. El solo sonrió y me beso, pero más apasionado.

Nos quedamos minutos en el sofá dándonos besos y caricias con ternura y pasión. Hasta que él me levantó y me llevó a su cama. Ya sabía como iba a terminar esto, creo. En fin, yo estaba encima de él sacándome la remera y él igual aunque estuviese acostado. Después el puso sus manos detrás de mi espalda para desabrochar el corpiño negro que traía y mientras él hacía eso, yo sacaba su cinto de "I ♥ HATERS!" y desabrochaba el botón de su pantalón. Él me miraba con cara de pervertido al ver mi torso desnudo. El giró e hizo que yo quede debajo de él. Empezó a bajar y darle besos a mi panza mientras desabrochaba los botones de mi jeans. Terminó de desabrocharlo y bajo más abajo. Bajo la parte inferior de mi ropa interior y empezó a lamer con lentitud mi zona sensible.

No pude contener los gritos y gemí. 

Él al ver que me llenaba de placer, seguía con más velocidad y más pasión. Después de unos minutos, se levantó, se sacó los pantalones y su boxer, se coloco un preservativo y me penetró. Sí, el youtuber nº1 de España me penetró. 

Nunca sentí una sensación agradable en toda mi vida. 

Me embestía más rápido y con más fuerza al ritmo de mis gemidos. Él acabó cuando grité su nombre con placer unos minutos después y a los segundos acabé yo. Caímos completamente desnudos y rendidos. Una respiración estaba más acelerada que la otra. Estábamos mirándonos en silencio sonrojados, sentía que a través de la mirada nos hablamos y nos trasmitíamos ternura. Todo en silencio hasta que él habló.

― _____ ― susurro.

― ¿Qué pasa, Rubius? ― dije tierna.

― Te amo, te amo demasiado ― hizo una pausa ― Nunca me dejes preciosa.

― Te amo más ― dije ― Nunca lo voy a hacer ― dije finalmente, y como era de noche y también tarde, nos quedamos dormidos.

Él me abrazaba; me protegía con sus brazos. Todo era perfecto. 

*

Me desperté primera que él. Me levanté de la cama y al ver que estaba desnuda, me acordé lo de ayer y reí en mi mente. Decidí cambiarme. Después me dirigí a la cocina para hacer el desayuno para los dos. Preparé las cosas para empezar a hacer el desayuno y ya en minutos, tenía todo hecho. Llevé las cosas en la mesa. Había dos tazas de café y facturas, algo simple. De repente, sentí unos pasos que venían de la habitación y era él. Estaba en cuero con un pantalón como pijamas a cuadros.

― Ow ― dijo "triste" ― me gustaba como estabas ayer.

― ¿Cómo estaba ayer? ― pregunté curiosa.

― Desnuda ― dijo sonando sexy.

― A mi también me gustaría verte como ayer, pero no podemos ir desnudos por la vida ― dije riéndome.

― Exacto... A no ser... ― dijo.

― Sos un boludo, vení a desayunar.

― Me encanta el desayuno que haces para los dos ― dijo riéndose, me gustaba su risa.

― A mi me gustas vos ― sonreí.

― A mi también me gustas tú ― el me devolvió la sonrisa ― Hey, después de desayunar, ¿vamos a una quedada que organizaron los Dickstroyers para hacer gilipolleces?

― Dale, las quiero ver en persona.

― Créeme que es más divertido ― me contestó.

*

― Quiero ver como se golpean la pija para quedar estériles ― reí mientras caminábamos a una plaza.

― ¿Sabes que los denunciaron? ― me preguntó.

― No, ¿por qué?

― Porque le dan patadas a los críos en la cabeza y huevos ― me respondió.

― Pero los chicos esos, ¿le dijeron que querían que le pegué? ― pregunté curiosa.

― Pues claro, Thous no pega patadas así por así ― dijo riéndose.

― Entonces no le veo nada de malo si los chicos quieren que le peguen, será culpa de ellos ― contesté. La protección ésta bien, pero me parece cualquiera que le echen la culpa a ellos mientras que los chicos querían que le peguen.

― Pues es verdad, pero gñe, no importa ― dijo y hubo un silencio ― Mira, allí están todos ― dijo señalandome a un grupo de gente.

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CAPITULO HOT ahre.

igual, no soy buena para escribir cosas así, gñe.

¡Gracias por leeer! ^^

Like y fap!  *corazón gay*.