Capítulo Especial

464 60 28
                                    

Este capítulo no afectará la historia, simplemente creo que sería algo bueno que leyeran. Ojalá les guste <3.

POV Omnisciente

La primera vez que el hijo del Rey del Infierno y el ángel llegó con una herida, más bien con un gran moretón en el brazo, el moreno fue el primero en darse cuenta debido a que el demonio no estaba en la casa en ese momento.

-¿Cariño? ¿Quién te hizo esto?.-Preguntó Nicolás, intentando no levantar la voz, pero se le notaba bastante alterado.

-Un compañero.-Contestó Damien, quien simplemente tenía siete años pero ya estaba bastante adelantado con las clases. Respecto a eso, Dark estaba bastante orgulloso.

Bueno, en realidad Dark Jaime estaba orgulloso de su hijo en todo lo que hacía. Le sorprendía lo mucho que se parecía a él, claramente no la parte mala, sino en la personalidad y hasta en el ego que tenía.

-Quería que le hiciera una tarea de lenguaje.-Continuó hablando su hijo, explicando lo que había pasado.-Le dije que no porque no sabía como hacerla sin que suene como que la hice yo y no él, quien ni siquiera parece saber escribir. Creo que no le gustó, que en resumen, le haya dicho estúpido.

El pequeño moreno mordió un poco su labio y lo observó cuidadosamente.

-¿Te duele mucho?.-Cuestionó Nicolás, sabiendo que en algún instante tendría que hablar con su hijo sobre tener algo más de "filtro". No obstante, ahora no era el momento para retarlo ni nada similar.

-No, papá.-Respondió el pequeño híbrido, tomándose un momento para luego seguir hablando.-¿Se va a pasar pronto?

El ángel asintió pero aún así su preocupación no desapareció.

-Esto no pasa constantemente, ¿cierto?.-Preguntó el moreno, queriendo saber si había pasado algo por alto o alguna herida de la que no se hubiera dado cuenta antes.

-No, es la primera vez, papá.-Contestó Damien, diciendo la verdad.-No te preocupes.

Todo se quedó en silencio sólo por unos segundos.

-¿Quién va a ir a mi reunión hoy?.-Cuestionó su hijo, ocasionando que Nicolás abriera un poco más los ojos al recordar aquello.

-Eh, cariño...

-Iré yo.-Respondió Dark, apareciendo de la nada, originando que Damien lo observara y fuera rápidamente a abrazarlo. El demonio sonrió y lo cargó, siempre amando esta situación cuando llegaba a su casa.-Hola cariño.

Esto último lo dijo entretanto se acercaba a su esposo, depositando un leve beso en los labios de este mientras seguía cargando a su hijo.

El Rey del Infierno bajó a su pequeño híbrido, causando que este se quejara cuando pasó a tocar su brazo, logrando que el primero en ser nombrado se diera cuenta del moretón y frunciera el ceño, inconscientemente colocando sus ojos negros.

-¿Quién fue?.-Preguntó Dark en un tono bajo y ronco, claramente peligroso para cualquiera que lo escuchara.

-Fue Sebastián.-Contestó Damien, siendo sincero, provocando que el demonio se quedara en silencio por un tiempo.

-¿Sabes si ese awe... niño va a ir hoy a la reunión?.-Cuestionó Dark Jaime, no diciendo muchas insolencias pero en ocasiones así le costaba un poco.

-No lo sé.-Dijo su hijo, no entendiendo por qué preguntaba aquello.

-Cariño, ¿qué tal si vas a jugar en tu pieza mientras yo hablo con tu papá?.-Preguntó Nicolás, con un tono delicado y sonriéndole un poco a su pequeño híbrido, ocasionando que este asintiera y fuera a su habitación.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 23, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

LightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora